VETERINARIO

🐾Quinta Garra🐾

❝Perdón.❞┇

┇❝Perdóname tu a mi, no soy digno de respirar el mismo oxígeno que alguien tan perfecto como tú.❞

El pelinegro apretó con fuerza sus puños, joder solo iba a hablar con la existencia más perfecta en este universo.

Había pasado cosas peores, como la vez que celo al mayor de los Haitani, o cuando casí muere a manos de un encolerizado Sanzu.

En comparación de esas experiencias traumaticas esto era nada.

Pero, ¿Cómo se lo hacía entender a su cerebro?

Llevaba 3 minutos intentando dar un paso al frente, sin que sus piernas temblaran.

Intento darle forma a todos sus miedos, recopilando las veces en que estuvo a nada de morir.

 Por su puesto, la vez en que por accidente casí pierde al gato de la pareja de Baji estaba entre las tantas visitas que le había hecho a San Pedro.

Joder, ya no recordaba como caminar.

 Mientras más se concentraba en crear a ese monstruo con las caras de Sanzu, Rindou, Taiju y demás personajes escuchó una conocida voz.

"-¡Hey! Koko, ¿Eres tú?-" Vaya había olvidado a una de sus peores pesadillas y el último miembro de las desgracias/bendiciones en su vida. Hanma.

Vaya que imaginaba muy bien, había escuchado a la perfección su voz. Esperen, ¿Lo imaginó o lo escuchó?

Con más miedo que Shaggy y Scooby juntos abrió sus ojos comprobando que no había sido su imaginación.

Un "mierda" resbaló de sus labios y con toda la prisa del mundo se adentró a la cafetería rogando por que haya sido una alucinación ver a Sanzu, Taiju y Rindou conversando con Hanma detrás de un arbusto.

La campanita de la puerta resonó por el lugar y un agradable aroma a café se adentró en sus fosas nasales. 

 Bueno, si algo malo pasaba al menos sabría donde ir a comprar litros y litros de café mientras se hunde en depresión.

Bueno, ya había entrado, ya no había marcha atrás.

Con la mirada se dedicó a buscar a su ¿Cita? ¿Probablemente asesino por algún error que cometió? Bueno al rubio.

Una vez lo encontró prácticamente había olvidado como se respira.

Es que no podía ser real. ¿Estaba haciendo algo fuera de lo normal? Para nada, simplemente estaba bebiendo café. Solo estaba bebiendo café y se veía jodidamente atractivo.

No cabe duda que dios tenía preferidos.

Antes de que el pelinegro entrará en su faceta "Todos son más bonitos que yo" pudo escuchar el grito de un pájaro de largos cabellos con cicatrices en el pico dándole ánimos.

 Era cierto, si algo iba a pasar, pues que lo hiciera y ya, total podía convencer a sus demonios personales y terminaría siendo consentido al menos un mes por ellos.

Envalentonado, camino a pasos firmes al rubio, desprendiendo una confianza que no sabía que poseía.

"-Hola, tengo entendido que me fuiste a buscar a la clínica ¿Cierto?-" Exacto, solo por hoy le haría caso a sus amigos cuando le decían que si el quería podría tener a sus pies a cualquiera.

"-Exactamente, tu fui a buscar a la clínica.-" El pelinegro tuvo que apretar su abrigo para que las hormonas no le ganasen.

"-Lo siento, en esos entonces no estaba en condiciones.-" Por su puesto que no, definitivamente el rubio fuera de las personas más atractivas que había conocido y lo había visto en un momento de debilidad. "-Aún así. ¿Para qué me solicitaba?-"

El rubio frunció su ceño, por lo que trago duro. "-Tiene que ver con mi gato.-" Carajo, lo sabía ese gato estaba planeando una manera para asesinarlo.

"-¿Sucedió algo con él?-" Ahora que lo pensaba, si no lo mataba el rubio lo mataba Baji por haberle hecho algo a un animalito.

"-Dos cosas. Primero, le diste un premio ¿Verdad?-" El pelinegro se limito a asentir, comenzando a imaginar los posibles resultados. "-Ya veo, por eso regresó raro.-" Una diminuta sonrisa se asomó por los labios del rubio.

El corazón de Koko dió un pequeño salto, claramente estaba frente a un ser hermoso.

"-Te rasguño.-" Afirmó, asombrando al chico, pues había cubierto sus brazos para que no se notará.

"-¿Por qué supone eso?-" Al menos por ahora le salvaría el pellejo a ese gato. Digo, tenía que ganarse a esa bola de pelos si quería ganarse al dueño ¿Verdad?

"-Es un gato bastante expresivo, y suele tener comportamientos.." Se detuvo un momento a pensar en como describir a su  gato, dándole un sorbo a su café. "-Bastante específicos, por lo que lo deduje.-"

"-Vaya..-" El pelinegro mordió la parte interna de su labio inferior, no sabía como seguir la conversación. Ahora maldecía su falta de comunicación relativamente normal sin comentarios ácidos, ofensivos o de doble sentido.

El joven de cabellos claros lo miró, dándose cuenta de que todo ese tiempo el pelinegro había estado de pie. "-Que maleducado de mi parte, por favor. Siéntate.-"

Si le preguntarán a Koko, él había olvidado sentarse. Estaba lo suficientemente entretenido mirando las facciones del contrario como para percatarse de eso.

"-Oh, claro.-" Contestó con simpleza, rogando por que los gritos de desesperación  y alivio que  escuchó y que particularmente se le hacían conocidos fueran su imaginación.

"-Lo siento.-" El rubio se disculpo con un atónito Koko.

"-¿Qué? No, no hace falta.-" Hizó un ademán, para que el de hebras claras no se preocupará.

"-De verdad, tanto por mi gato, como por no haberte invitado a tomar asiento.-" Alguien hágame el favor de llamar al 911 y pedir un DEA por que estamos a nada de que alguien tenga un paro cardíaco.

El joven de orbes claras, llamó a un camarero.

"-Además, también debo disculparme por mi actitud y el mal comienzo que tuvimos.-" Cancelen el DEA, ni siquiera haciendo el mejor RCP podríamos salvar de la muerte a Koko. "-Me presentó, soy Inui Seishu y estaré yendo varias veces a la clínica por mi gato.-"

Tal vez si lo podría tener entre las piernas en un futuro cercano. Pero por ahora se conformaría con tenerlo en la clínica.