—Querés mi celular para llamar a alguien? Deben estar re preocupados
—Emm, si no te molesta, si -Me sonrió amablemente y me dio su celular, estabamos en su casa, su ahora esposa me había curado, ya que para llegar al hospital más cercano había horas de viaje.
Llamé a Tiago y después de unos tonos, una voz femenina contestó.
—Hola?
—Emm, hola, disculpame, quien sos?
—Esa es la pregunta que yo tengo que hacer
—Necesito hablar con Tiago
—Él está ocupado ahora, pero decime lo que sea que quieras decirle y yo le aviso, soy la novia,Tatiana
Me quedé estática en mi lugar, deseaba que fuera un sueño o estar alucinando, cómo podía pasar? Hace días estabamos juntos, me había besado y abrazado.
Yo secuestrada y él consiguiendo mi reemplazo, que lindo.
—Decile que Rocío llamó, y que se vaya a la mierda en lo posible
Y sin esperar respuesta, corté.
Tenía mucha bronca, yo la estaba pasando para el orto, estaba asimilando todo lo que había pasado en tan poco tiempo y él cogiendose a otra mina.
Limpié mis lágrimas y me levanté de la cama, le devolví el celular a Felipe que me dijo que a la noche íbamos a salir para Buenos Aires.
—Gracias, están haciendo mucho por mi
—Es lo menos que puedo hacer, te lastimé muchoy me arrepiento, entiendo si me odias, pero quiero hacer esto por vos, mereces estar bien y feliz con las personas que querés
Por mi mente se cruzó Tiago, pero rápidamente esquivé ese pensamiento. La había pasado muy mal en los últimos años, por eso, no iba a deprimirme y esperar a Tiago toda la vida, tenía más cosas por las que preocuparme y más por experimentar. Nadie murió por un corazón roto, y yo no iba a ser la excepción.
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les juro que amo a la Ro que se viene, una Ro empoderada y que no necesita de un hombre para vivir.
