De las casas y el sombrero

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El "mellizo del salvador", como lo apodaron al día siguiente de esa noche, siguió disperso en el transcurso de la misma. Solo registró algunas selecciones. Hannah Abbott fue sorteada en Hufflepuff; Hermione Granger, una chica que pareció social (ni bien se sentó empezó a interactuar y ni siquiera la mala mirada de algunos profesores la calló), en Gryffindor; un par, Goyle y Crabbe, con un cuerpo robusto que debía tener tanta grasa como músculo, pues eran grandes pero no del todo fofos (Lily si hubiera estado allí le hubiera dicho que aprendiera; sobre sacar músculo, no grasa, por supuesto), fueron a Slytherin; Draco Malfoy, que le pareció tanto y más atractivo que Cedric, también... Cuando llegó el turno de su hermano se concentró plenamente. Duró varios minutos más que los demás, y finalmente fue a slytherin también

Algunos, como el pelirrojo o el famoso pocionista Prince, parecieron sorprendidos. Otros, como el director o el rubio platinado con ojos de plata, como si se lo hubieran visto venir. Inmediatamente después lo llamaron a él.

El sombrero quiso ponerlo primero en Hufflepuff, pero con algo de coraje y bastante ingenio, intentó hacerlo cambiar de opinión, Ravenclaw quizás. Entonces, el objeto le sugirió Gryffindor; le dio asco, aunque mucho más miedo. El seleccionador rió en su mente y le dijo que había sido de prueba. Calló, meditó un poco más y supuso, por lo que dijo, que estaba escarbando, no sabía si en sus memorias o en qué, pero cerró diciéndole que, efectivamente, como le pareció en un principio, no era para Ravenclaw, pero no entraría en detalles porque sería doloroso. Y que no le daría motivos porque era extenso, pero suplicó que no se rindiera con su hermano, y "mejor aún, que se quisiera a sí mismo", y, de ser posible, ambas. No entendió ninguna de las últimas pero accedió cuando oyó "¡SLYTHERIN!".

Curiosamente, el sombrero le dijo algo similar a Harry, con un añadido. "No te rindas con tu hermano y no des por hecho cosas sobre él; o sobre nadie, mejor".

Disimuladamente, en momentos aleatorios cada hora, a partir de esa primera comida en el edificio, Hulderic se fijó en el otro mellizo. No dejó de comportarse como un mimado, a la par de su amigo Malfoy, aunque ciertamente, en contraste con él, "tenía un poco más de buena persona", pensó tímidamente el hermano del primero y compañero de casa del segundo. Harry, por su parte, se preguntaba por qué su mellizo era tan callado, por qué comía tan poco... O por qué era tan raro, en general.

Hulderic comía tan poco porque, desde que supo que era intersexual, Lily había comenzado a ser dura respecto a su figura... Sobre lo otro, era simplemente una combinación de determinados aspectos de su forma de ser sumado a cómo fueron potenciados con la "terapia psicológica" y la "educación de sus tutores". Si Hulderic hubiera tenido cualquiera de las personalidades que había formado en las vidas pasadas que lo acechaban por las noches, no les diría padre y madre. 

Reencarnaciones y mellizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora