Reencarnaciones y mellizos

Desmayo

Y de alguna forma terminaron llegando al mismo tiempo los cuatro, justo cuando Hermione cerraba la canilla. Se miraron a los ojos y su hermano se encogió de hombros y despabiló primero.

El mellizo de ojos negros dijo: "Hay un troll, Herms. No preguntes, nadie sabe cómo, pero se coló".

"Nosotros lo encerramos", agregó Ron.

"Pero no sabemos por cuánto", acotó Draco. 

Los fuertes pasos del troll resonaron muy cerca del baño.

"Evidentemente no por mucho. Huyamos", mencionó Hermione.

Pero antes que pudieran salir, el trol se asomó él mismo.

Todos saltaron a esconderse y creían que conseguirían su cometido, pero el trol encerró a Hermione. 

Ocurrieron muchas cosas al mismo tiempo. Hermione gritó. Harry trató de distraer a la bestia, pero ésta casi lo atrapa a él, de no ser que Ron, quien lo distrajo él mismo. La cosa se agachó para agarrarlo a él y Harry lanzó un hechizo sobre la arma tosca de la bestia; hizo que levitara. Luego, la soltó sobre la cabeza. En tanto, oyeron a su mellizo murmurar algo. Cuando el trol cayó, con el mismo hechizo que Harry, acomodando el gran objeto para que pareciera que se había golpeado solo.

Apenas había terminado cuando entró el equipo docente que conocían y uno que los Potter habían oído que era el profesor de cuidado a las criaturas mágicas. No sabían qué hacer. 

Hulderic con les lanzó chispas a cada uno en el culo, y así consiguió que salieran. Cuando lo hicieron, cada uno notó que no había ningún otro y cada uno sintió que algo los empujaba. Un murmullo más, y de la nada estaban los otros. Nadie parecía entender nada, excepto Hulderic, que les hizo un gesto de silencio y otro de que lo siguieran. No pararon hasta la entrada del comedor. No entraron. Antes, lo frenaron y al mismo tiempo le lanzaron un montón de preguntas al mismo tiempo. Ellos mismos no se entendieron, pero, aparentemente, él sí lo hizo.

"Ron, yo sé que pasó. Draco, sí, tuve que ver yo; nadie más, de hecho. Hermione, sí, ese fue el hechizo desilucionador. Harry...", iba a añadir algo más, pero se cayó hacia adelante antes de terminar. Él vio todo oscureciéndose y los otros lo vieron a él cerrando los ojos.

Harry fue quien tuvo los reflejos necesarios para atajar su caída. Hulderic se sorprendió que tuviera la fuerza para sostenerlo. Abrió los ojos y se apartó un poco, con su mellizo todavía tomándolo de los hombros. Iba a retomar la palabra cuando se le aflojaron las piernas. Casi esperándoselo, Harry lo sostuvo con más fuerza. 

"Apártense", dijo con firmeza, y sin detenerse a ver que lo hicieran, se  puso al lado de su hermano. 

Los demás obedecieron. 

Harry acomodó uno de los brazos alrededor de sus hombros sosteniéndolo de la cintura. 

Hermione, fugaz, lo imitó del otro lado.

"¿D-dónde queda la enfermería, Draco", murmuró Ron. Tenía sus labios en un puchero pequeño. Se sentía culpable. Tan mal que se refirió a él esa tarde...

"Por acá", dijo Draco antes de posicionarse al frente y guiarlos; estaba mordiendo sus labios, preocupado, como todos los presentes, en realidad. Ahora agradecía profundamente a sus padres de obligarlo a estudiar el mapa de Hogwarts.

Harry, con el ceño fruncido, giró levemente su rostro. Su hermano se había desmayado. Su rostro, pacífico, parecía dormir. Hermione, después que el otro se volviera al camino, sonrió levemente; por lo menos algo bueno se había sacado. Estaba igual de preocupada que Harry, pero eso mismo le quitaba una preocupación de sus hombros. 

Tras ese minuto, todos se concentraron el camino y fueron apurando más el paso.

Sin que lo supieran, por su lado, cierto profesor los había seguido en el último tramo.