Último recado

Capitulo único

          Port Mafia, una organización ilegal en Yokohama.

          Forme parte de ellos hace mucho y con ello sentencie mi libertad a trabajar en la oscuridad de la ciudad. Así me encontraba cada noche, como integrante de los grupos armados para proteger a los ejecutivos o ser de la primera línea en la mayoría de veces en las que trabajé; hasta la última misión de apoyo en las que terminaron mis servicios como mafioso.

           Desligado de familia de la cual preocuparme y solo pensar mi vida es suficiente, veo moverse la vida de muchos sin nombre a un centro negro de no regreso. Pero en los últimos momentos que pude recordar en vida a pesar de no merecer algún momento de paz antes de perecer.

           Pero como todo ser humano, lo hacía por supervivencia.

           De lo que voy dentro de la mafia lo único que puedo recordar y que valga la pena es un pequeño grupo de personas que iban juntas a un lugar dentro del territorio de la mafia, tal vez en algunos de sus tiempos libres.

           Uno era un ejecutivo.

           El reconocido ejecutivo más joven en toda la organización, aunque más era por su desempeño en el trabajo y ser de los más temidos, el Ejecutivo Dazai Osamu.

           Me tocaba formar parte de su equipos de búsqueda siempre haciendo mi mayor esfuerzo para sus expectativas y evitar tener problemas, que la mayoría peligrábamos, al no cumplir con la orden del ejecutivo. Al terminar los trabajos se retiraba a reportar el resultado de la misión, siempre siendo exitosa, lo veía de lejos acercase a su... ¿compañero?

           En ese entonces cuando aún no entendía mejor la relación que llevaban el Ejecutivo con uno de los recaderos de la mafia, que era curiosa a mi parecer (y lo dejo de ser después de la advertencia que nos dio sobre "él").

           En lo habitual se encontraban en el camino hacia trabajos, el humor del ejecutivo cambiaba para hablar con su compañero Sakunosuke Oda, hablaban no por mucho pero parecía ser lo suficiente para ellos.

           Así pasaban los días en la mafia hasta la llegada de la organización extranjera Mimic.

           Muchas investigaciones de búsqueda y planes fueron elaborados.

           Así como hubo hechos que cambiaron el rumbo de la organización.

           Una de ellas fue la desaparición del Informante de Inteligencia cuya información sería suficiente para derrumbar la Port Mafia.

           Sakaguchi Ango, era de las personas más importantes y valiosas en la mafia; creo que también formaba aparte de los compañeros del Ejecutivo Dazai, no lo veía debido a su discreción.

           El gran caso de la Organización Mimic estaba por culminar, en cuanto se nos informó de que Oda fue involucrado en el caso de la búsqueda de Sakaguchi Ango; encontrándolo pero perdiendo rastro tras su traición al revelar que era parte de Mimic como espía pero también siéndolo para la mafia por parte del Departamento de Habilidades Especiales.

           Era muy grande el conflicto y peligroso para la mafia involucrarse legalmente con el gobierno.

           El Ejecutivo Dazai nos envió en un grupo de diez en apoyo a Oda que se había dirigido a la base enemiga de Mimic para enfrentar a su líder.

           Llegado al lugar, en la entrada no había nadie vivo, todos habían sido disparados con precisión al ser solo una bala la que los atravesó, se escuchaban disparos a lo lejos desde adentro; de seguro estaría enfrentándose con el líder.

           Nosotros sabíamos en el fondo de nosotros que lo que nos esperaba detrás de la puerta, era peor de lo que vimos en la entrada, aun así íbamos a paso firme trotando para llegar rápido a nuestra asistencia. A la entrada del gran salón vimos llegar al mismo tiempo el grupo de soldados de Mimic ingresar desde el otro lado.

           Los disparos fueron inmediatos.

           Oda que se encontraba en el centro del salón mirando directamente al Líder de Mimic, empezó a disparar a los soldados mientras el líder también disparaba también con habilidad hacia la mafia, todos empezamos a caer.

           Solo fueron segundos.

           En el que me impactó una de las balas que provenían del lado opuesto del salón, justo al abdomen y al hombro cerca de la clavícula; caí de inmediato junto con el equipo y los soldados que solo fuimos una pequeña distracción para dos grandes usuarios de habilidades.

           La sangre fluía con rapidez y moriría pero fue suficiente mi agonía para presenciar algo que fue de las mejores vistas hasta dejar el infierno.

           Cuando caí a la fría superficie con sangre y pólvora tenía en mi periferia de visión a los dos hombres hablando, o declarando sus últimas palabras.

           En un momento sentía perder los sentidos hasta escuchar el disparo final por parte de los dos; el líder cayó muerto al igual que Oda.

           Pensé que iba a terminar así hasta que escuche un grito que me despertó por última vez.

           Era el Ejecutivo Dazai.

           Llegó corriendo muy desesperado hacia Oda. No esperaba ver esto, solo podía intentar captar lo que hablaban en eso Dazai eleva su voz diciendo que lo salvaría pero Oda lo calló.

           El silencio del lugar me permitía escuchar su pequeña conversación, ya perdía el conocimiento pero quería ver que sucedía después; decidí mantenerme vivo mientras la sangre se iba rápidamente pero quería resistir hasta lo último y lo que escuché a continuación era inimaginable para alguien dentro de la mafia:

           —"Ya deberías saberlo. Estés en el lado que toma vidas o del lado que salva, no pasara nada más allá de tus propias expectativas. Nada en este mundo llenara el vacío de tu soledad. Vagaras en la oscuridad por la eternidad"

           Oh como comprendía esas palabras, supongo que estoy destinado a la oscuridad, ¿A dónde iré tras morir? No lo sé.

           El ser que perece da de sí mismo a otro para que se encamine, después de su muerte, ¿cambiara el destino?

           —"Sé del lado que salva a las personas", "Si ambos lados son lo mismo, entonces escoge convertirte en una buena persona. Salva al débil, protege al huérfano. Puede que no veas una gran diferencia entre lo correcto y lo incorrecto, pero... salvar a otros es algo un poco más maravilloso"— ¿cómo los sabes?"— Preguntó Dazai— "Lo sé. Lo sé mejor que nadie"... "'La gente vive para salvarse a sí misma. Es algo que notan antes de morir..."

           Ese momento fue clave para el cambio en la organización, por supuesto nadie lo sabría y yo moriría junto a este acontecimiento que es poco conocido desde que se borró toda información relacionada con Mimic. Y sería una de las grandes preguntas de la mafia.

           "¿Por qué dejo la mafia?"

           Unos amigos al hacer una promesa: donde uno se encaminaría a cumplirla, mientras el otro lo cuidaría desde lejos.

           Me dio una tranquilidad enorme al morir. Saber que es posible tener un motivo para salir de esta mancha de sangre pero aun teniendo una gran carga por detrás.

           Dazai desde ahora cambiaría por su amigo, no dudaba para creerlo, es posible que deserte de la mafia y dejara atrás la mafia con el recuerdo de su amigo perdido, nunca tendré una oportunidad así en la vida pero al menos logre presenciar una, que hasta mi último respiro fue lo más hermoso que vi antes de morir.

La conversación de Oda a Dazai es extraida de la novela ligera "Dark Era", por ello no menciona que es su "amigo" como dice en el anime.