CHANGE | Cole S

1| EL CAMBIO

📍 CIUDAD DE MEXICO

HANNA

Estaba en mi habitación terminandome de arreglar para ir a la escuela, hoy presentaría el examen final...que es sobre todo lo que ví desde la secundaria hasta la preparatoria, ¿Que si estoy nerviosa? No, ¿Por qué lo estaría? Para esto estuve estudiando tanto, así que estoy preparada.

Ya estoy lista, tomo mi mochila y bajo, se supone que mi madre estaría a las 6:30 am en el auto para llevarme a la escuela, es decir, que ya debería estar ahí.

Bajo las escaleras, y me consigo a mi hermanita pequeña en la sala.

No puedo evitar reír al ver su cara tierna, al verme.

—Hola Hanny—Dice con una sonrisa.

—Hola peni—Le devuelvo la sonrisa.

—¿Ya te vas?—Pregunta sorprendida.

—Si, cariño ya me voy—Pausé par admirarla—Adiós.

—Chaíto mana—La mire enseguida.

—Penélope el vocabulario, sabes cuántas veces te he dicho que hables bien—Corregí

—Lo siento—Baja la cabeza triste.

—No importa mi vida, solo recuerda que la próxima vez, debes hablar correctamente.

Asintió feliz, de nuevo.

Odio que mi hermana use un vocabulario inadecuado. Definitivamente, me encanta que las personas sean decentes, tengan buenos modales, limpios y puntuales...Bueno me gustan las cosas perfectas, eso es todo.

Pero, las personas no son cosas.

Subconciente, ¿Cuántas veces te he dicho que no te metas en mis asuntos?

Salgo de la casa y me encuentro a mi mamá en el auto. Tal y como habíamos acordado.

—Siempre tan puntual—Habla mi mamá.

—Es lo correcto—Sonreí, subiendo al auto.

—¿Algún día te vas a relajar?Dice encendiendo el auto)

—Si tu concepto de relajación es dejar que algo salga mal, mi respuesta es no—Negue cona cabeza varias veces.

—No me refiero a eso, es que aveces ser perfeccionista no está bien; puede causar daño en tu salud—Suspira.

—No creo que querer que las cosas estén bien sea malo.

—¿Sabes qué? Olvídalo...y mejor cuéntame ¿Que vas a estudiar?—Pregunta, cambiando de tema.

—Pienso estudiar, ingeniería química—Hablé esperanzada.

—Sabes que si pasas este examen, te gradúas si no lo pasa repites el año—Cuestionó.

—Lo se, y es por eso que me pase toda la semana estudiando—Afirmé.

—No creo que sea suficiente...

—Mamá, confía en mí—Interrumpí, bajando del auto.

—Esta bien, Adiós bella y suerte—Lanza un beso, y finjo atraparlo, para luego poner la mano en mi pecho.

—Adiós, y gracias.

Una de las razones, por las que me gusta la perfección es porque, siempre quiero demostrarle a mi madre que puedo ser la mejor hija del mundo, no quiero nunca desepcionarla, hacerlo es mi mayor temor, yo no me puedo ver fallandole a mi madre...quiero siempre ser la número uno, y así ella esté orgullosa de mi.