Darkeness

Ame

Shinichiro había sido su todo, su héroe, su mejor amigo, su modelo a seguir. Shinichiro era valiente, el más genial, el más valiente incluso si no era el más fuerte, su hermano los había criado a él y a Emma.

Su hermano era imponente, había viajado fuera del país visitado lugares geniales, había traído las postales y gracias a ellas habían podido ver los geniales lugares.

Shinichiro regresó con ellos, les mostro todo lo que vio, trajo también los motores y de alguna manera había logrado convencer a su abuelo y transformar una parte de del hogar ancestral de los Sano en un taller, recordaba todas las horas que paso en ese lugar, la manera en la que él lo había ayudado con la decoración, los sonidos que lograban escucharse en la noche una vez que había comenzado a trabajar como loco en los motores, las maldiciones que en ocasiones soltaba cuando algo salía mal. Recuerda pasar las tardes viéndolo trabajar y limpiarse la grasa de la cara.

La felicidad en su rostro cuando logro hacer rugir el motor, incluso cuando solo logro reconstruir perfectamente uno y no los dos.

"Uno será suficiente por el momento, llegará el tiempo en que el segundo vuelva a rugir junto al primero"

Manjirou recuerda cuando le dijo claramente el conflicto que tenían con los Black Dragons debido a Kazutora, y el simplemente le había dicho

"Haz lo que quieras, los deje por ti, no tomaré partido por ello"

Era verdad su hermano había dejado a los Black Dragons, recordaba como algunos de los miembros incluso habían venido a su casa a rogarle a su hermano que regresara.

Y de alguna manera él y sus amigos lo habían logrado, su pandilla lo logró, la Tokyo Manji Gang se fundó, con la derrota de los Black Dragons.

Fueron felices, la vida en esa edad era una de las cosas más preciadas que tuvo, los recuerdos que había hecho con cada uno de ellos, con cada uno de sus capitanes, los lugares en donde habían creado aventuras y recuerdos.

Su hermano lo llamó a su tienda una tarde, a pesar de las diversas quejas que Mikey le dio cuando este lo hacía que lo ayudará con las motocicletas, incluso el bufido que soltó cuando le dio que lo ayudará con la suya esta vez.

Su hermano no dejaba que nadie más le metiera mano a su tesoro.

"¿Por qué estoy haciendo esto Aniki?"

"Debes de aprender hacerlo, si no puedes, tendrás que conseguir algún mecánico y eso significa dinero"

"Pero ni siquiera tengo motocicleta" y era verdad no después de lo que le hizo al Halcón.

"Te daré la mía" su cuello casi se rompe cuando volteó a ver el rostro sonriente de su hermano "Eres el jefe de una pandilla, y todos tus amigos tiene grandes motocicletas Takashi tiene una joyita con él, lo mínimo que puedes hacer es intentar igualarle el ritmo, si no que van a decir lo patético que es el líder de la Tokyo Manji Gang"

Manjirou se levantó del lugar para apreciar la elegante pieza de ingeniería enfrente de él, la posesión más preciada de su hermano "¿Cuándo?"

"Tu cumpleaños se acerca ¿no es así?" su hermano se acercó y alboroto sus cabellos "Estoy seguro que puedes esperar unos cuantos días más y todos podrán enterarse de como luce el comandante de Touman en una verdadera motocicleta"