Jimin lo había mencionado en una de esas pocas ocasiones en las que podían conversar sin discutir. Yoongi y Taehyung estarían trabajando esa noche en Uranio, así que Jungkook había decidido ir también.
Su último encuentro con Taehyung le había dado el empujón que necesitaba para acabar con la falsa relación que tenía con Jimin y para reconocer lo que sentía por el castaño. No tenía ninguna garantía que le asegurara que Taehyung le correspondía, pero, en este momento, ese era un precio que estaba dispuesto a pagar. Ya no quería seguir muriéndose en silencio.
A esas alturas de la noche, Uranio ya estaba completamente lleno, así que Jungkook supo que debía apresurarse en encontrar a Taehyung, antes de que este termine su turno. Ello implicaba subir a la segunda planta porque en la primera buscarlo sería como buscar un alfiler en un pajal.
– ¿Estás buscando a Jimin? –Yoongi está parado a su costado, con unos vasos vacíos en las manos–. No tiene turno hoy.
Jungkook asiente–. Estoy buscando a Taehyung, ¿sabes dónde está?
– Ya ha terminado su turno, así que ya debe haberse ido o lo debe estar haciendo ahora – Yoongi lo mira confundido–. ¿Ha pasado algo?
Jungkook le dice que no y pasa por su costado, ignorándolo y buscando ansioso a Taehyung entre el mar de gente. Entonces lo ve acercarse a la barra de la primera planta y, sin perder ni un segundo, Jungkook emprende su camino en esa dirección. Sin embargo, por algún motivo, se detiene cuando ve que Taehyung se ha acercado sin dudarlo a un chico que tenía una botella de agua entre las manos.
Se siente inquieto. Nota que el chico elimina el espacio entre él y Taehyung. Quiere correr y poner una barrera entre ambos, pero no tiene ningún derecho. Se queda quieto y jura que ha escuchado a su corazón romperse como un pedazo de vidrio cuando los ve besarse.
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El chico de la bufanda lila (taekook)
Romance"El amor duele tanto como reconforta" Las vidas de Kim Taehyung y Jeon Jungkook se cruzan como si ambos hubiesen estado destinados el uno para el otro, pero el silencio podría llevarlos por rumbos separados. Kim Namjoon, cegado por sus propios miedo...