En la mañana me desperté con tranquilidad. Había dormido bien y no sentía cansancio como otras veces.Aunque, aún seguía pensado en lo de la noche anterior. Aquella extraña sensación de que alguien me vigilaba y me me había tocado.
Sacudí la cabeza tratando de alejar esos malos pensamientos. Bajé las escaleras dispuesta a preparar el desayuno para que Max fuera a trabajar. El día anterior probablemente no había ido al trabajo por hacer el cambio de papel tapiz.
Elizabeth: buenos días...-me sorprendió el ver a Max haciendo panqueques- que estas...?
Max: buenos días, solecito! Estoy preparando tus panqueques favoritos! -se acercó un poco y me dió un beso en la frente, algo fácil ya que era más alto que yo- ve a la mesa, ya casi están listos.
Asentí con una sonrisa y me fui a la mesa. Me quedé pensativa ya que esa actitud no era común en él. Normalmente se hubiera levantado de mal humor y mediante gritos me hubiera pedido el desayuno.
Pareciera que estábamos hace 10 años atrás. Cuando apenas desperté de aquel sueño. Cuando conocí a Max. Me trataba como a una princesa. Pero con el tiempo, era más serio, aburrido, y más cascarrabias.
Algo debió haberle pasado...
No me molestaba en absoluto, claro que no. Pero podía llegar a ser algo abrumadora esa actitud suya tan repentina.
Me encogí de hombros al no encontrar una explicación y esperé unos minutos más.
Luego, vi a Max salir de la cocina con el plato de panqueques. Un vaso de leche fresca y un recipiente con varias frutas cortadas en pequeñas porciones, entre ellas, estaba banana, fresas, guayaba y piña.
Mis ojos brillaron y en seguida comencé a comer.
Había olvidado lo bien que le quedaban los panqueques a ese hombre.
Él solo se sentó en la silla frente a mi y me miró comer con una sonrisa. Parecía disfrutar mis expresiones gustosas por la comida.
Al terminar ni siquiera me permitió levantarme. Tomó todo y lo llevó al fregadero.
En tan solo dos minutos terminó y secándose las manos con un trapo, me preguntó qué tal estaba, pero claro, él ya sabía la respuesta.
Elizabeth: estuvo increíble! Me encantó de verdad.
Max: jaja, me alegra mucho que disfrutes de mi comida, Lizzie. Pero ya verás lo que prepararé para el almuerzo.
Elizabeth: oh, es que...saldré un rato y no sé a qué horas regrese.
Max: jaja, no digas tonterías, como una niña de 12 va a salir fuera así? Ve a tu habitación y juega con tus muñecas, dibuja, has lo que quieras, pero no saldrás.
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∘∘∘✾POR SIEMPRE Y PARA SIEMPRE CON LOS MIKAELSON✾∘∘∘
Ma cà rồng"𝘕𝘰, 𝘯𝘰 𝘦𝘴 𝘯𝘪 𝘵𝘶 𝘤𝘶𝘭𝘱𝘢 𝘯𝘪 𝘭𝘢 𝘥𝘦 𝘵𝘶𝘴 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘢𝘯𝘰𝘴, 𝘦𝘴 𝘮𝘪𝘢, 𝘱𝘰𝘳 𝘤𝘰𝘯𝘧𝘪𝘢𝘳𝘮𝘦...𝘱𝘰𝘳 𝘢𝘳𝘳𝘪𝘦𝘴𝘨𝘢𝘳𝘮𝘦, 𝘴𝘢𝘣𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘪𝘣𝘢 𝘢 𝘵𝘦𝘳𝘮𝘪𝘯𝘢𝘳" Prohibida la copia o adaptación. Feliz día ッ