Capítulo 4

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EMMELINE

¿Cómo se atreve a llamarme después de que la descubrí en la cama con su mejor amiga? 

*Te dije que no volvieras a buscarme -dije molesta- no me interesan tus explicaciones...¿Acabas de decir que me amas? ¿Cómo te atreves a decirme eso? No vuelvas a llamarme -colgué.

Maldita sea. Teníamos una relación de varios años, todo iba de maravilla, llegué a pensar que ella era la mujer con la que quería pasar el resto de mi vida. Cuando cumplí 23 decidí ir a estudiar artes a París. Y cuando volví, me encontré con la sorpresa de que mi novia y su mejor amiga se acostaban, vaya recibimiento que tuve, me dolió bastante, pero me refugié en la pintura, eso ya fue hace dos años, ahora me encuentro en paz y feliz con todo lo que he logrado a mis 26 años.

Suspiré.

Salí al jardín, necesitaba fumar un cigarrillo, y así lo hice. 

JESSICA

Mi teléfono sonó, vi que era Walter.

*Walter, ¿Qué tal? 

Walter: Hola Jess, ¿Qué haces esta noche?

*No tengo planes, solo lo de siempre, ir a casa y dormir -reí.

Walter: Eso suena bastante aburrido, ¿te parece si paso por ti y vamos a cenar?

Lo pensé un poco, es una buena idea, me sirve de distracción.

*Me parece perfecto -sonreí.

Walter: Excelente, paso por ti entonces, chao bella -dijo y colgó.

Guardé el celular de inmediato, ya que Emmeline dejo muy claro que odiaba el uso del celular en el trabajo. Miré por la ventana y ella fumaba un cigarrillo en el jardín, había traído una pequeña bocina, puse música y comencé a pintar.

EMMELINE

Después de un rato me dirigí al cuarto de trabajo, entre más me acercaba a la puerta, escuchaba música y una hermosa voz que cantaba, entré sigilosamente y vi a Jessica pintando mientras cantaba y bailaba. Me recargué en el marco de la puerta y me quedé observando lo que hacía.

Pintaba un bosque, se fijaba en cada detalle, paraba y analizaba lo que hacía.

*Esto realmente es lo tuyo -dije y pegó un brinco del susto para después apagar la bocina, reí.

Jessica: ¿Siempre acostumbra asustar así a las personas? -dijo y me acerqué.

*No -dije mientras analizaba su trabajo- es muy bello, definitivamente eras la indicada para este puesto- ¿Qué harás esta noche Jessica?

Jessica: Y...yo, iré a cenar con un amigo al salir -dijo y asentí.

*Bien, nos vemos mañana, puedes retirarte, buenas noches -entré a la oficina y llamé a Louis- Oye bobo, ven a mi oficina, tengo una botella de vino que espera por nosotros aquí.

De inmediato acepto mi invitación, lo conocí en la academia de artes, es un gran amigo mío. Después de unos minutos, llegó.

Louis: Cariño, estas bellísima como siempre -dijo y dio un beso en mi mejilla.

*Tu igual -dije y ambos reímos, tomé dos copas y abrí la botella.

Louis: Me encontré con una chica muy linda al entrar, que por cierto un chico guapísimo vino por ella, ¿Lo conoces? ¿Sabes si ellos son novios? -dijo y reí, mi querido amigo es gay. Serví el vino y le entregué su copa.

*Es Jessica, va entrando a trabajar aquí, y ella menciono que solo eran amigos -dije mientras caminaba a su escritorio, di un pequeño trago.

Louis: Vaya, nueva victima, veamos cuanto te soportan esta vez -dijo y ambos reímos- ¿y que tal? ¿Es buena? -caminó hacia mi.

*Es buenísima -señale el lienzo que había pintado esta mañana- lo hizo hoy.

Louis: Oye, esto esta divino -dejó su copa y se acercó con el en sus manos a mi escritorio- ¿Sabes de quién son? -negué- Se parecen bastante a los tuyos -dijo mirando el lienzo y después a mi- ¿No te interesa saber de quién son?

Tomé la copa y me acerqué a la ventana que daba al jardín, di un trago.

La verdad es que si, desde que la vi he tenido esa duda, ¿de quien serán esos ojos?





ME ENAMORE DE MI JEFADonde viven las historias. Descúbrelo ahora