🎠 dos ✓

973 101 20
                                    

— Dos cucharadas de vainilla y la masa estará lista — repetía los ingredientes mientras se movía por toda la cocina en busca de más utensilios e ingredientes faltantes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Dos cucharadas de vainilla y la masa estará lista — repetía los ingredientes mientras se movía por toda la cocina en busca de más utensilios e ingredientes faltantes.

Todavía faltaba un rato para que Samuel llegara a la casa pero, él quería tener el pastel listo. Mientras Rubén horneaba, al otro lado de la ciudad Samuel se encontraba eligiendo varios conjuntos de ropa para su lindo omega.

A pesar de que los omegas eran escasos, seguian produciendo ropa para ellos, las personas que tenían omegas podían considerarse millonarios, ya que las cosas que estos necesitaban ahora eran más costosas, casi de edición limitada. Pero para alguien como Samuel, gastaría todo su dinero para que su omega esté feliz.

De regreso a casa el viaje fue tranquilo, o al menos lo es cuando no notas todo lo que pasa a tu alrededor, gente robando, asesinando, secuestrando y vendiendo omegas, todo esto Samuel lo pasaba de largo, ya que si viera todo eso se llenaría de impotencia y lo que menos quería era transmitir eso a Rubén por la marca de vinculación.

Al pasar un rato por fin salió de la ciudad para dirigirse al campo, en ese lugar estaba su casa, lo más alejada posible de Alfas y betas celosos que rogaban por tener un omega bajo su poder.

La casa estaba diseñada para estar escondida, a simple vista no se podía apreciar ya qué estaba rodeada de árboles, pero si te acercas lo suficiente la verás, una casa de dos pisos y grandes ventanales que dejaban entrar la luz del sol, detrás de ésta un pequeño huerto y una cerca para tener animales, patos, cerditos, pollitos y conejitos, dentro de la casa deambulaban 3 gatos.

En pocos minutos entró a la casa, siendo recibido por el exquisito olor de pastel de chocolate, no sabía si era un pastel horneado o si Rubén estaba dejanos su aroma por toda la casa, pero al entrar a la cocina todas sus dudas se fueron.

Un pastel de chocolate con chispas de colores y más glaseado de chocolate estaba sobre la barra de la cocina.

Pero su pareja no estaba ahí, en la cocina, por lo que fue a buscar en la planta de arriba, nada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pero su pareja no estaba ahí, en la cocina, por lo que fue a buscar en la planta de arriba, nada. Comenzó a asustarse, si Rubén estuviese afuera con los animales, estos harían ruido y su osito también, ya que es muy ruidoso, el pánico comenzó a apoderarse de el.

¿Y SI ALGUIEN HABÍA VENIDO? ¿Y SI SE LO LLEVARON? ¿Y SI FUE UN ALFA?

Esas preguntas atormentaban su cabeza mientras recordaba los sucesos de hace unos años, no quería repetirlos.

Pero el no ver a Rubén por ningún lado lo hizo abrumarse demasiado, cosa que el omega sintió.

Pero el no ver a Rubén por ningún lado lo hizo abrumarse demasiado, cosa que el omega sintió

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Editado ✓

✩ 𝑫𝒖𝒍𝒄𝒆 𝑫𝒆𝒍𝒊𝒄𝒂𝒅𝒐 [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora