Preparación

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Dallon

―Entonces, ¿Todos entendieron el plan?.―¡Sí!-Brendon y Ryan dijeron al unísono.

Sin más que decir, todos decidimos marcharnos, ya eran cerca de las 10 de la noche y al siguiente día, Ryan y yo teníamos que trabajar en la pastelería, todos recogimos nuestras cosas y decidimos abandonar el lugar, nos despedimos, yo era el último en salir, pues al ser el dueño de la pastelería tenía que dejar cerrando el local, entre a mi auto, estaba a tres cuadras de mi casa, de repente sonó mi teléfono, al parecer me había llegado una notificación, saque mi celular y pude visualizar que era Breezy (la chica que había conocido en una fiesta hace algunas semanas) me pedía de favor que la fuera a recoger ya que se había peleado con su novio, lo pensé un momento, de todas maneras no tenía que hacer y disponía de 2 horas antes de mi hora de dormir, además era una chica muy agradable, entonces decidí pasar por ella.

Había llegado al lugar de la ubicación, era un parque algo grande, pude visualizarla a lo lejos sentada en la acera del parque, estacione mi auto y me baje del mencionado.

―Hola- le dije encaminándome hacia ella.―Hola- contesto con un tono muy apagado, evito mirarme a la cara.

Me senté alado de ella y me incline hacia un lado para poder verla mejor, pues estaba escondiendo su rostro y a decir verdad me preocupo un poco.

―Breezy-pronuncie con voz grave.

Ella me regreso a ver, y ahí fue cuando pude ver, pues mis pensamientos no me habían fallado, ella volvió a esconder la cara, sin embargo, esta vez la tome de la barbilla, quede atónito, pues en el ojo derecho de su cara tenía un morado, se podía notar que había llorado, ya que traía los ojos muy hinchados.

―¿Qué fue lo que paso?- pregunte muy preocupadamente.―Me pego- pronuncio entre sollozos.―¿Pero por qué?- dije aun en un estado de shock y confusión, no hacía falta preguntar quién fue por que en el mensaje que me había mandado hace ya algún tiempo me especificaba que había peleado con su novio.―Estábamos en el parque a eso de las 8 y media pm, el últimamente tenía una actitud muy extraña conmigo, es decir, él es el capitán del equipo de mi colegio y los últimos tres partidos han perdido, y cada que pierde se desquita conmigo, hoy no fue una excepción, perdieron su partido y actuaba muy grosero, me cansé de ser con quien se desquite y decidí parar con todo esto, le dije que ya no quería que las cosas siguieran así, él se enojó y comenzó a poner escusas inventadas, dijo que yo ya no quería estar con él porque yo le estaba engañando con alguien, ¿puedes creerlo? le grite, ya que sus testimonios eran falsos, me pego, no había nadie alrededor, entonces el aprovechó para seguirme agrediendo.―Lo lamento mucho, ese tipo está loco, te ayudare a pararlo, lo prometo- le di un abraso y pude sentir que su piel era hielo, pues llevaba una camiseta, me quite mi chaqueta y se la entregue, mire sus brazos y pude notar que también estaban llenos de morados, se reflejó enojo en mi rostro, ella lo pudo notar y pude ver cierta incomodidad en ella.―¿Me podrías llevar a casa por favor?-dijo limpiándose las lágrimas.―Claro- dije parándome de la acera, le extendí la mano para ayudarla a imitar mi acción, abrí la puerta del auto, seguido de esto ella subió y yo hice lo mismo, encendí el auto y le pedí de favor que me guiara a su casa.

Llegamos a su casa, se despidió y me asegure de que ella cruzara la puerta para poder encaminarme a mi casa, en el camino iba pensando que la gente se estaba volviendo loca, pues no solo a Breezy la agredían de esa manera, Brendon también pasaba por esa situación, ¿ cómo la gente puede seguir permitiendo esto? Era un tema muy delicado y me aseguraría de poder ayudar a mis amigos, no iba a tolerar esta injusticia.

**

Ya era sábado, hice mi rutina diaria y me dirigí al local, siempre tenía que llegar una hora antes de la apertura, pues yo era quien abría el local y daba una rápida limpieza, eran las 9 y media y Brendon llego, preparamos las cosas y los clientes comenzaron a llegar, la verdad es que mi pastelería se había convertido en un lugar popular en la ciudad, no es por presumir, pero mis postres eran una gloria, los sábados había gente a todas horas, pues la mayoría no trabajaba en los fines de semana.

Se hizo tarde, el reloj marcaba las 4 pm, una chica entro al local y logro llamar mi atención, se acercó al mostrador y pude confirmar que era Breezy, traía gafas por obvias razones, ella no quería que se notara el morado que llevaba en su ojo, también traía un buzo algo largo y unos shorts.

―Hola- se dirigió a mí con una sonrisa.―Hola, ¿Cómo estás?- conteste de la misma forma.―Mejor que ante ayer, hable con mi mamá y me aconsejo muchas cosas.―Me alegro mucho.―Si, mañana voy a hablar con él, ya que como te había contado, están mal en sus partidos, entonces entrenan todos los días, mañana, después de que acabe su entrenamiento, hablare con él.―Me parece una buena idea, aunque si necesitas ayuda no dudes en llamarme.⎯Claro, gracias, aunque iré muy preparada.- dijo con una sonrisa muy juguetona.

Después de haber dicho eso, me quede pensando ¿A qué se refería con que iría muy preparada?

Brendon

Ya era tarde, mañana era domingo por lo que significaba una sola cosa,

¡Mañana le daríamos su merecido a Pete!, Dallon me había dicho que para realizar esto necesitaríamos una cuerda, cinta adhesiva, y un pañuelo, pues nuestro plan era un poco complejo, pero no era imposible.

El plan consistía en que Pete acabe su entrenamiento, cuando él se dirigiera a su auto apareceríamos Ryan, Dallon y yo con unas mascaras para que no nos reconozca, lo tomaríamos por la espalda y lo amararíamos con la cuerda, después le pondríamos la cinta en la boca, de esta manera no podría gritar, lo llevaríamos al carro de Dallon y nos iríamos al bosque y le daríamos su merecido. Dallon me había dicho que me encargara de hacer la maleta con lo necesario, entonces eso fue lo que hice, me asegure de no olvidar nada, mientras guardaba las cosas ya podía sentir satisfacción, sé que la violencia no es para nada buena, sin embargo, James necesitaba una buena paliza, yo necesitaba verlo sufrir, así como él me ha hecho sufrir durante cinco años, ¿Qué podría salir mal? estaba muy ansioso por que ya sea mañana, me dirigí a mi cama y finalmente me dormí.

No me dejes soloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora