\(^-^)/ Hola, la historia esta narrada desde el punto de vista de nuestro hermoso cumpleañero Suga, y finaliza en la parte donde se separa con (~). Gracias por leer ^3^ Besotes.
///////////////////////////Estábamos en una habitación, yo nisiquiera conocía al dueño de esta, había sido obligado a ir por Nam Joon. Era una especie de reunión entre amigos, yo no tenía ánimos para nada, sólo éramos cinco personas en la habitación, yo estaba aburrido, por lo que cogí un libro, me senté con comodidad en la cama y lo comencé a leer.
Recuerdo que tú reias y hablabas con un chico que coqueteaba contigo, (el era lindo) y parecía gustarte su atención.
Yo sólo leía el libro que nisiquiera recuerdo el nombre, fingiendo no prestarle atención a mi entorno. Tu me atraías eso era innegable, pero eras mucho para mi, y yo no soy de las personas que caminan sin temor a tropezar, yo camino e evitó a toda costa caerme.
Realmente no se como o cuando sucedió, pero sólo se que deje de leer el libro y levantó mi mirada para analizar la situación, la habitación estaba en un rotundo silencio, sólo éramos tu y yo, (pero no me altere).
Se disimular muy bien mis sentimientos y al querer buscar una respuesta de ti, sólo me encontré con tu rostro sonriente, sentia algo nuevo, tu me mirabas de una manera que no podía descifrar.
Tal parece que nos llevábamo bien, pues comenzaste a hablarme muy animado y te sentaste junto a mi en la cama, yo sonreía ante tus chistes y tus bromas. Tenía claro que intentabas seducirme, lo veía en tus ojos, en la manera coqueta con la que me sonreias o golpeabas levemente mi cuerpo, pero también sabía que no estabas confiado, veía la duda en tus ojos, pues tu no lograbas ver atraves de los míos, no sabías si correspondería a tus avances o no.
En mi interior sólo podía disfrutar el verte indeciso, en si dar el primer paso o rendirte. Ese simple gesto demostraba que te gustaba, pues no te querías rendir y seguias buscando llamar mi atención. Cosa que me parecía ridículo, ¿tu?, un chico tan hermoso y popular ¿buscando mi atención?, ¿podia ser eso posible?, pero había otra pregunta que albergaba en mi cabeza con egoísmo, ¿fuiste tu, el causante de que quedaramos solos en la habitación?. Al imaginarme una respuesta positiva a esas preguntas, mi corazón se paralizaba por completo.
Te pregunté sobre el chico que coqueteaba contigo y el, si le correspondías. Se que habré parecido una persona curiosa o hasta chismosa. Pero tu semblante de sorpresa y desilusión me dieron a entender, que pensaste en que no me importaba verte con otra persona y como consecuencia, que tampoco me importabas tu de esa manera. Pero lo que tu no sabías, era que detrás de mi sonrisa cómplice al preguntartelo, albergaba la gran llama de los celos.
No me gustan los retos, pero aveces pienso que si, ya que con esa simple pregunta corrí el riesgo de perderte, de que te rindieras y aceptarás el coqueteo de ese chico, pero si yo realmente te gustaba, sólo inventarias una escusa para volver esa pregunta en una oportunidad para insinuarte conmigo y no sabes lo feliz que me hiciste al hacer aquella simple pregunta, en la cual intentaste ocultar tu nerviosismo con una sonrisa divertida.
'¿Estas celoso?'.
¡Por dios! ¡¿cómo no estarlo?!, quería saltar a tus brazos y devorarte por completo, pero no quería lucir desesperado y mucho menos que pensarás que era un lanzado. Por lo que sólo sonreí ladino a tu pregunta, mirándote directamente a los ojos y pude ver un brillo en ellos, cuando por fin notaste mi interés hacia ti.
Me sonreiste coqueto y no fuiste consiente de como se erizo mi piel debajo de mis ropas, ante ese simple gesto tuyo. Me mirabas directamente a los ojos y yo no tenía intención de desviar la mia de los tuyos, pero mi conciencia me engaño, haciendo que desviara mi mirada hacia tus hermosos labios.