𝐸𝑙𝑙𝑎, 𝑚𝑖 𝑚𝑢𝑛𝑑𝑜.[EDITADA]

2

-Entonces...

Podía escuchar su voz cada ves mas lejos, no estaba prestando atención solo la podía ver a ella. Un movimiento en mi brazo izquierdo me saco de mi pequeño transe.

—¿Te gusta la dama vampiro?—Mencionó Eli, mi compañera de banco. Nos habíamos conocido apenas me senté a su lado, fue muy amable conmigo.

—¿La dama vampiro? así le dicen?— un pequeña risa se escapo de mis labios, tal vez más alto de lo que quería.

—Señorita Vital, podría poner atención al menos el primer día?—Ví como se sentaba enojada en su escritorio. Su mirada demostraba fuego, enojo y diría que tranquilamente ya me hubiera matado.

—Lo siento.—dije para "poner atención"

Pero me era imposible. Mi mirada se iba hacia su trasero, tenía puesto un pantalón de infarto. Ajustaba en las mejores partes, casi no se sentó en la clase y como no iba a mirar? Que hubieran echo ustedes en estos momentos.

Me fije por última vez la hora, solo faltaban 1 minuto y tocaría el timbre. En eso, sonó y estaba por salir cuando apenas llegué a la puerta, su voz sonó en el salón.

—Señorita Vital, se puede quedar unos minutos?—dijo Venable desde su asiento levanto la mirada hacia mi.

—Esta bien...—respondi para volver a mi lugar.—¿Me esperas un segundo afuera Eli?—ella simplemente asintió y salió fuera del salón.

Una chica paso por mi lado antes de salir y me dijo bajito "suerte, la vas a necesitar". No lo entendí, hasta que solo quedamos las dos en el salón, Venable y yo.

—Señorita Vital, le voy a decir algo y espero le quede bien claro para lo que resta del año si?—no esperó a que termine de hablar, porque su voz sonó de vuelta— No permito que en mi clase no presente atención, acá se viene a estudiar, no a tener la cabeza en algún muchacho. Espero que este incidente no se vuelva a repetir, porque la única solución es echarla de mi clase.—todo eso lo menciono casi gritando, yo solamente podía escuchar, nisiquiera me atrevía a cruzar mis ojos con ella.

—Esta bien, lo lamento tanto.. no se volverá a repetir—dije lo más rápido posible y con un nudo en la garganta, solo agarre mi mochila dispuesta a salir.

Tenía ganas de llorar, me sentía mal.

Apenas salí, fui hasta el comedor con Eli, ninguna de las dos dijo una sola palabra. Claramente ella ya estaba acostumbrada a la "dama vampiro" pero yo no.

—¿Estas bien?—hablo Eli una vez que nos estamos en el comedor.

—No sé

—No le hagas caso a la dama vampiro, seguro se levantó con el culo dado vuelta, algo muy común ella.—dijo con una sonrisa, la cual me contagió.

Luego de terminar de almorzar, fui a mi siguiente clase inglés. Esta clase también la compartía con Eli, así que sola no estaría. Por suerte!

—Cate te va a encantar! es mi profesora favorita, es la mejor—estaba muy entusiasmada Eliana, decía que su clase favorita era también.

—Le tiras muchas flores a Cate, espero que sea así—hable un poco risueña

Luego de eso, entramos y la profesora aún no estaba dentro. Así que elegimos un lugar para sentarnos, no estaba ni muy adelante ni muy atrás. El lugar perfecto.
Unos zapatos me sacaron de mi pensamiento, la profesora se encontraba adentro. No voy a negar que no era linda, ya que tenía facciones atractivas y muy difícil de sacar mis ojos de ella.

—Buenos días alumnos, hoy vamos hacer un repaso de los que nos quedó la semana pasada.....Según me informaron, hoy se integro una nueva alumna, se encuentra aquí?—Ella empezó a recorrer su vista por todo el salón,buscando una cara que no haya registrado.

¡Bingo!

Nuestros ojos se encontraron por unos segundos, entonces me di cuenta que quería que yo me levante para presentarme.

—Hola...Yo soy la nueva...Me llamo Leonor Vital—hable mientras me levantaba.

—Genial, bienvenida Leonor!—hablo tan feliz y con una gran sonrisa, me generaba muy buenas vibras.

La clase fue muy entretenida, para mi que me cuesta un poco inglés, me resultó todo bastante fácil. Saliendo del salón, me dirigí a mis últimas dos clases que tendría del día, Química y Literatura.

Salí del instituto y me dirigí a mi hogar. El camino fue bastante silencioso, me tomé el tiempo de analizar las casas, escuchar el ruido de los pájaros y notar que estaba a punto de llover, en un rápido instante se nubló todo. Tuve que llegar corriendo a mi casa, pero cuando llego me encontré con una escena bastante dolorosa si la viera mi abuela materna.....

¡La ropa estaba colgada en el patio!