Capítulo 18 Dolor

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¿Qué pasa con el cuerpo humano cuando la temperatura es muy baja?

Bueno, esa pregunta si la puedo contestar.

El cuerpo humano actúa en modo de supervivencia cuando se expone a cambios drásticos de temperatura, cuando está expuesto a temperaturas frías pierde calor de manera muy rápida tanto que no puede calentarse solo; si se está expuesto por demasiado tiempo puede ser mortal, empieza con quemar la energía que podría almacenar en él.

En circunstancias normales eso llevaría aproximadamente 1 hora, tomando en cuenta el descenso gradual de temperatura, pero éstas claramente no son circunstancias normales ya que la temperatura pasó de estar fría a volverse congelante, lo que aceleraba todo a menos de 20 minutos, desde hace años que el mundo experimenta cambios extremos, como por ejemplo la lluvia que hubo hace 10 años, nadie pensaría que después de un tiempo se volvería tóxica para el cuerpo humano (no mortal, pero si dejaría ciertas secuelas bastante incómodas), así que puedo decir con seguridad que este clima no es normal y claro que tenemos motivos para estar preocupados.

La hipotermia es un término utilizado desde hace años, algo simple pero peligroso, en casos extremos la temperatura baja afecta el cerebro de manera que la persona que se encuentre en esa situación enfrentará problemas para moverse e incluso pensar con claridad, ¿Cómo se puede detectar? puede ser por los temblores en el cuerpo, agotamiento, manchas rojas en la piel, tartamudeo, confusión, desorientación, pulso débil o pérdida del conocimiento.

Si no se trata a tiempo puede provocar insuficiencia en el corazón y los pulmones y finalmente la muerte, eso si no se llega al extremo de la congelación.

Debí darme cuenta cuando cada noche hacía más frío que la anterior que no podía significar más que problemas.

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Alex se detuvo de golpe y giró sobre sus pies para quedar frente a los demás, pero no hacía falta que dijera nada. El ambiente se había tornado peligroso en cuestión de segundos; parecía que todos estábamos dentro de un congelador gigante.

Los chicos empezaron a temblar pero nadie parecía querer moverse de donde se encontraban.

- De-bemos ir-nos-. Mi voz sonaba pausada a causa del frío, sabía que era momento de buscar algún lugar para protegernos, pero ni eso sería suficiente si no podíamos encender una fogata de nuevo, y tomando en cuenta que ya no contábamos con el espejo de Cassandra, las opciones eran menores.

Will fue el primero en moverse, incluso antes que yo.

- Hay que avanzar, no podemos quedarnos quietos; adentrarnos más en el bosque y buscar una cueva o algo, pero tiene que ser rápido.- Empezó la caminata y nadie se negó, habíamos entrado en modo supervivencia.

Parecía que llevábamos horas caminando, pero cuando Lucy vio su reloj nuevamente, apenas habían pasado 12 minutos; el frío provocaba que fuéramos más lentos, ninguno estaba vestido para soportar esas temperaturas y empezaba a cobrarnos factura, teníamos la piel roja, los labios partidos y los dedos entumidos; definitivamente era una terrible forma de morir.

Traté de recordar en mi cabeza algún dato que estuviera omitiendo sobre el cuerpo humano y las temperaturas frías, pero el dolor, el cansancio y el sueño comenzaban a volverme inútil haciéndome olvidar todo lo demás.

Alex fue el primero en hablar después de un largo rato.

- Cc-re-o q-uu-e veo aaa-lgo.- se notaba que esa simple frase le estaba costando más de lo que realmente parecía, pero tenía razón; después de tanto caminar por fin se alcanzaba a ver algo a la distancia.

Amor 101 (En Proceso) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora