Breaking the Mask: The Damn Secret (Hyunknow)

Capítulo 42: Espíritus sedientos.

Si a Minho le hubieran dicho hace un mes que habría una profecía de él, se hubiera reído como nunca antes y más aún, si se enteraba que ésta había sido emitida por el Oráculo de la Locura, el más poderoso de todos los tiempos. Ahora estando consciente de que su vida estaba completamente jodida, no pudo hacer más que ver a Lucas con completa incredulidad

Las profecías eran algo muy usual entre los Oráculos. Ellos al ser información del futuro, pasado y presente personificada, a veces tenían lapsos de descontrol mental y lanzaban esas palabras encriptadas que terminaban no pareciéndose a nada de lo que realmente pasaba

Pero, él había dicho que el príncipe perdido sería desencadenado y Yoon Jeonghan le había dicho príncipe. ¿Era acaso una maldita coincidencia? ¿Acaso el señor del destino se estaba divirtiendo a cuestas de él?

La situación comenzaba a enojarlo

Hasta Milán sentía la gravedad de la situación, removiéndose en su espalda y maullandoOdiaba a su madre, odiaba a su supuesto padre por hacerlo pasar por éstas cosas. Ése pensamiento le dirigió otra ola de dudas y furia, ¿Qué iba a hacer su padre por él? ¿Qué interés tendría en su hijo?

¿Qué diablos le aseguraba que su padre Demonio iba a aceptarlo?

Minho se reprendió a sí mismo, él no iba en busca de un padre, él iba en busca de saber qué diablos era para saber controlarlo. Él no sabía absolutamente nada de demonios, pero sentía que la presencia del hombre castaño no debía estar en su mente, no debía estar torturando a Fénix

Era como si el maldito estuviera poseyendolo desde antes de saber que era un demonio

— No hablaremos de esto aquí — Gruñó Minho cuando otra vez el dolor en su cabeza lo atacó y dejando a todos con las palabras en la boca, se dirigió hasta el final de la entrada de la Ciudad del sol, jodidamente listo para abandonar el Distrito de las Hadas —

Hyunjin lo siguió al igual que los demás, Minho podía escuchar sus pisadas en el césped y las ramas que serpenteaban en los costados. Sin embargo, el Vampiro mayor se detuvo abruptamente cuando vio algo faltante en la carretera

— Felix, ¿Dónde diablos esta la camioneta? — Preguntó Hyunjin con voz calmada, Felix palideció viendo la calle vacía. Minho sólo tuvo que voltear un poco para ver la mirada ahora roja de Hyunjin dirigirse a su hermano —

— ¡Deje las llaves porque los chicos se quedaron allí durmiendo! — Se defendió Felix, Hyunjin se pasó su mano libre por el cabello aún respirando calmadamente —

Minho recordó que Jeongin le dijo a Changbin que cerrara la camioneta, así que se volteó a ver a su amigo. Changbin observaba el cielo oscuro con una mirada de inocencia demasiado falsa

— ¿Qué hiciste? — Le susurró esperando que nadie se diera cuenta —

— Le hice un favor a mi novio y me deshice de la camioneta que odiaba — Respondió encogiéndose de hombros, Minho reprimió una risa —

— Hyunjin va a matarte — Advirtió completamente divertido, alejándose de él mientras Changbin lo veía mal —

— ¡Robaron el auto! — Gritó Jeongin carcajeándose con fuerza — ¡No nos salvamos de ninguna! —

— Cálmense — Dijo Seungmin y chasqueó los dedos. Con un crujido, apareció una camioneta negra y bastante amplia en la calle, Minho retrocedió para que el neumático delantero no le cayera en el pie y observó el auto con sorpresa, era bastante lujosa aunque no demasiado —