El comenzo a observarla todos los días en la biblioteca
comenzo a conocer sus reacciones
le regalo libros
Ella conoció a un extraño por medio de libros
se enamoro
le regalo su corazón.
Pero por más que una persona sea para ti, no significa que e...
Cada año se publican miles de millones de libros, es imposible saber con precisión la cantidad de libros publicados, y aun así es asombroso que después de estar en la librería encuentre el libro perfecto y conecte con el universo y sus personajes de maneras que es imposible de poner en palabras, es un sentimiento tan externo al mundo real que no puede ser explicado, se tiene que sentir para entenderlo.
Comenzaba a pensar que solo podría tener una vida de aventuras y romance por medio de los libros, en la vida real no existe ese amor épico, no existe un Cardan que comience una guerra con el mundo marino, ni un Maxon que reciba un castigo por algo que dije, no soy el alma gemela de nadie, Rhysand no hará un trato por mí, no hay un Cassian que pueda entenderme aunque sea cruel con él, es cruel y rompe mi corazón saber que no podre experimentar esa clase de amor en la vida real.
Llegue a la biblioteca después de estar debatiendo mentalmente sobre el amor literario, quise soltar una carcajada histérica, pero mordí mi labio inferior y camine hasta mi esquina, es un pequeño espacio hasta el fondo de la biblioteca de la universidad, donde solo hay una mesa, una silla y un pequeño sofá con una linterna, hay una ventana y lo mejor de todo es que ahí siempre estaré rodeada de libros.
Al llegar sonreí y, deje mis cosas sobre la mesa, me senté en la silla y comencé a sacar mis cosas de mi mochila, mi estuche lleno de marca textos, un par de libretas, post-its, mis lentes, mi computadora, audífonos y finalmente mi teléfono junto con mi libro, acomode las cosas por toda la mesa.
Coloque mis audífonos y reproduje mi playlist favorita "amores literarios", el mundo a mi alrededor dejo de existir, me puse mis lentes y abrí mi libro "Nosotros éramos mentirosos".
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Llegue corriendo a la biblioteca después de ver las diez llamadas perdidas de mi mejor amiga Malia, llame la atención de algunos alumnos y me encogí de hombros antes sus expresiones fulminantes, busque con la mirada a mis amigos y al verlos camine a paso lento hasta ellos, arrastre la silla haciendo tanto ruido y me senté en ella, reí al ver como varios alumnos se iban del lugar.
-Lo siento, estaba comiendo, por eso la demora -observé a las personas en la mesa-
-Niels, ya no puedes llegar tarde, el proyecto se entrega en un mes, y no llevamos ni la mitad del trabajo, por favor llega a tiempo -Malia suspiro con pesadez después de decirme aquello, asentí sin ponerle mucha atención-
-Bueno, comencemos -agrego Nik a la plática, mi mejor amigo-
Comenzaron a decir lo que ya teníamos del trabajo y lo que hace falta, y como siempre empece a ver el lugar al rededor de mí, hasta que mi mirada paro al ver a una chica concentrada leyendo un libro, me quede observándola, ya que sus expresiones faciales y sus reacciones son mucho más interesantes que ponerme a trabajar.
La vi reír, fruncir el ceño, querer lanzar el libro, tomarse algunos segundo de lo que sea que leía, cambiar de canción, y emocionarse por llegar casi al final del libro, pero comenzó a llorar, y la diversión que me causo verla se esfumó al instante, sin dejar de llorar termino el libro, cuando lo cerró no pudo evitarlo y su llanto se volvió tan grotesco para mí que tuve que dirigir mi atención a mis amigos.
-Niels, ¿entendiste lo que dijimos? -escuche la pregunta de Malia y dirigí mi mirada a ella-
-Si, no digo si -raque mi nuca- lo siento, no los escuche, ¿Saben quien es ella? -hice un gesto con mi cabeza en dirección a la chica sin verla-
-Es Venus, está en mi clase de literatura, es extraña, ¿por qué? -hablo Nik mientras observaba a Venus, un lindo nombre-
-Estuve viéndola, solo me llamo la atención
Por fin pude volver a voltear a verla, y vi como recogía sus cosas, al tener todo dentro de su mochila se levantó y camino con rapidez pasando a un lado de nosotros y dejando un rastro a olor a vainilla a su paso, sonreí inconscientemente.
