Cap 49. Estani

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Aquella noche, después de despedirnos del gran día que habíamos pasado juntos, Hela y yo volvimos a casa compartiendo auriculares como si ya fuese una costumbre. Me enseñó la canción que me había dicho en el pasaje del terror que quería cantar: I was broken de Dark Rose. Con esa misma canción habían debutado unos años atrás, un gran éxito actual bajo el nombre de un grupo de música de rock/punk.

No los había reconocido Rose porque habían cambiado el nombre del grupo justo antes de debutar, pero al escuchar a la joven que cantaba al otro lado del auricular el corazón se me detuvo. ¿Cómo no iba a recordarla? Ella les había dado vida a mis composiciones años atrás, cuando el compositor y guitarrista de los NeoP era yo. Ahora eran Dark Rose, me pregunté de quién de ellos habría sido la idea. Traté de calmarme y fingir que todo estaba bien porque explicarle a Hela toda la historia sería recordar épocas de mi vida que había decidido enterrar. Le mentí al decirle que no podía ser, que necesitábamos destacar con algún clásico, y ella accedió sin poner ninguna objeción, aunque estaba seguro de que mi antiguo grupo le gustaba tanto que habría cantado cualquier canción de ellos. Eso me hizo sentir fatal.

Al llegar a casa, me devolvió la camisa de cuadros con una sonrisa, se dio una ducha y se encerró en su dormitorio. Yo no pude evitar indagar sobre los Dark Rose, habían llegado muy lejos en poco tiempo y eso me abrumaba. Parecían inalcanzables y sacaban a la venta temas propios con millones de reproducciones, todo lo que siempre había querido y a lo que había renunciado por permanecer junto a mi madre después de que ella empeorase. Ahora me sentía una simple gota en el océano. Una sombra de los Dark Rose.

Puse el móvil a cargar antes de que el asunto siguiese frustrándome y me encaminé al baño. Mientras el agua caliente me recorría el cuerpo desnudo, escuché a Hela cantar. Lo más probable es que creyese que desde la ducha no podría oírla ensayar, pero su voz traspasó las paredes y llegó a mí como una bendición caída del cielo. Lo único que necesitaba para aclarar mis ideas. Suspiré aliviado, sonreí y llegué a una conclusión.

No seríamos una gota en el océano ni la sombra de ningún grupo. Daba igual mi pasado; triunfaríamos. Lo haría por ella, la musa que me había inspirado desde que la conocí, y lo haría por mí.

©Amor por Causalidad I (APC) (COMPLETA) FINALISTA WATTYS2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora