Hoy era mi primer día en mi instituto soñado, ¡un puto instituto donde enseñan cosas sexuales! Es lo mejor, de lo mejor.
Conduzco hacia el portón del castillo llamada academia, no se ve como una academia se ve como un puto castillo. Eh, mejor me calmo.
Cuando estoy en el portón gigantesco toco la bocina de mi auto, cuando abren el portón me da la bienvenida un atractivo guardia, mide como un metro ochenta, músculos por doquier, piel canela, ojos azabaches, en una sola palabra delicioso.
Me pregunto si harán practicas con los guardias también, según lo que leí en sitios web sobre chicas/chicos contando su experiencia sobre Sex Academy, dijeron que cada día hay un itinerario, reglas que las disfrutaras y practicas donde pondrás a prueba lo aprendido. Nunca ponen muchos detalles, mala suerte hago un puchero inconscientemente. Noto como cierran el portón.
— Hola, nene. — me muerdo el labio apropósito, y repaso su cuerpo otra vez.
— Buenas tardes señorita... — se detiene dándome a entender que quiere que le diga mi nombre.
— El amor de tu vida.
— Te-tengo esposa. — carraspea y se recompone.
— Una pena, te ves muy joven para tener esposa.
— Y también tengo una hija.
— No importa mucho, ¿verdad? Digo si tu esposa no sabe que la engañas no le duele. — le digo con total descaro. Soy una perra, lo tengo bien en claro.
— Señorita le exijo más respeto.
— Como sea, — volteo los ojos con irritación — mira tú lista de estudiantes nuevos, soy Aimée Lacroix Dupuy. — mira hacia la libreta que tiene en manos, es una pequeña la cual dice "estudiantes de Sex Academy".
— Si, puede estacionar allí. — me señala un lugar donde hay muchos autos de todo tipo, muchos se ven más costosos que el mío. — Tome. — me da un papel con un número. El número es 30.
— ¿Para qué sirve? — digo refiriéndome al número.
— Con eso puede sabe cual es su habitación, aunque aún va a necesitar ir a donde la directora, va a saber donde estacionar.
— Gracias... supongo. — termino, y piso el acelerador, tengo mucha emoción, mucha, mucha. Aún no puedo creer que estoy aquí, ciertamente pensé que nunca entraría.
Estoy llegando hacia el aparcamiento, cuando reduzco la velocidad. Aún no quiero que me expulsen, no sin haber hecho ni una clase, con la velocidad que iba podría haber atropellado a alguien, suelto un suspiro.
Miro hacia la derecha tratando de buscar el número 30, poder aparcar e ir a la directora. Cuando lo encuentro aparco mi auto, veo que aún faltan carros en algunos sitios, lo más seguro es que sean de unos niños que todavía no saben lo que es la puntualidad. De solo pensarlo me irrita, me agarro la cien, y sobo suavemente para relajarme.
Con mi auto ya aparcado bajo, aliso mi vestido totalmente pegado a mi piel morena, es un vestido lindo, color blanco, con un escote de corazón, y ya. Simple y sencillo.
° ° ° ° °
Hola mi gente, les cuento que esta historia yo la tenia en mente desde que tenia apenas como 7 u 8 años, no me funen por andar publicando historias *les hace carita de cachorro mojado* pero bueno de esta historia no tengo fecha de publicación, pero supongo que a finales de este año la estare publicando, o antes ya ven que yo no me aguanto de nada.
PD: Sean todos bienvenidxs a Sex Academy, espero disfruten su estadía en esta loca historia.
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Sex Academy. © [En proceso, Borrador]
Teen FictionUna academia de sexo. Una academia donde las reglas son tan buenas que ni siquiera quieres incumplirlas. Una academia donde no te enseñan nada fuera de lo sexual. Una academia en donde disfrutas hasta los castigos. Una academia en donde Aimée quer...