Llegó la semana en la que debía entrar y milagrosamente apareció un árbol de jacaranda floreciendo, para mi era buena suerte ya que por primera vez iba a una escuela después de muchos años de no tomar clases así, estaba más que nervioso y emocionado de poder conocer como era todo, en eso vi a Tonal con tantos chicos a su alrededor me entraron unos celos horribles pero sabía que ella no era mía por nada del mundo como me haría caso, tengo mi cabello negro desordenado, mi ojos de un café tan oscuro, mis ojos eran rasgados casi asiáticos. Ella me vio y poco a poco se me fue acercando
-AAAAAA FUYUUUU VINISTEEEE- fue corriendo hacia mi gritando casi a los 4 vientos
-Jajajaja hola Tonal- me abrazó...era algo que no esperaba y me hacía feliz, fue un abrazo tan sincero y único, tan cálido y hermoso...
-Ven, te enseñaré toda la escuela y también tu salón ya que es conmigo-
-¿Enserio voy en el mismo salón que tu?, vaya hiciste un acuerdo de buen comportamiento a cambio de que fuera en tu salón jajaja-
-Nope, solo quiero que vayas conmigo, no te dejaré con gente que no conoces, sería malo para ti cielo-
Yo estaba más que feliz por ir con ella realmente parecía un sueño hecho realidad no como el "Dark wood circus", con esa historia Hātocu me espantaba de niña, tenía pesadillas cada noche pensando que me llevarían a ese circo. Tonal me mostro toda la escuela, de verdad no podía creer que me había perdido todo esto en toda mi vida hasta ahora, realmente no podía con todo lo que realizaban en esta escuela era impresionante. Llego la hora en que tenía que entrar a clase, al entrar me vieron raro era obvio porque soy nuevo aquí
-Hola me llamo Fuyucua Akiko Hernández Takahashi, mi nombre es combinación de japonés y nahuatl significa invierno, mi apellido materno es japonés ya que mi abuelo es japones y mi abuela es mexicana, me gusta el color azul y amarillo, amo comer sushi y platillos mexicanos, y pues espero llevarme bien con todos-
Me asignaron lugar al lado de quien supongo es amiga de Tonal
-Hola, soy Itza mucho gusto, soy amiga de Tonal- me saludó sonriendo
-Hola mucho gusto- esta claro que no hablo por nervios y miedo.
Las clases pasaron normal, no sabía muchas cosas ya que todo lo máximo que sabía era sobre psicología y ya, me gustó mucho la clase de química era demasiado interesante ya que explicaban cosas tan difíciles pero fáciles para mi, yo sabía mucho sobre elementos químicos, piedras, formulas y experimentos, algo no muy normal, yo era la única emocionada porque todos estaban como que medio aburridos y era normal pero no tanto ya que es una materia que es demasiado interesante. Llego el receso y por obvias razones no tenía con quien juntarme, hasta que llego Tonal
-Ven te llevaré conmigo durante todo el almuerzo porque no pienso dejarte solo con cualquiera- dijo- sonará obsesivo pero eres mío hoy, ya que debemos celebrar que al fin estas en esta escuela-
-Ok iré a donde vayas porque no conozco aquí- contesté- y tienes razón, por hoy soy tuyo-
Ella sonrió tiernamente y me jaló del brazo para llevarme al receso, hablamos de tantas cosas, de sus gustos tonto musicales como de comida y de colores, de que hacía en su tiempo libre, y de mucho más, hasta que me llevó a un lugar muy lindo, ella iba hablándome de tantas cosas que cuando vi los arboles de jacaranda me enamoré totalmente de ese lugar, era algo tan desconocido para mi que era tan hermoso al mismo tiempo que me olvidé de todo, incluso de Tonal, hasta que sentí su mirada demasiado cerca de mí, osea casi centímetros dios mío
-Oye Fuyu ¿me estás escuchando a todo lo que te dije?- me dijo, haciendo que me sonrojara de lo cerca que estaba
-¿Ah? perdón Tonal estaba demasiado concentrado en mis pensamientos que no me di ceunta y tampoco escuche lo que me dijiste, perdón- le dije- es que las jacarandas son mi árbol favorito
Hātocu decía que cuando el pidió la patria potestad de mi había muchos árboles de jacaranda, algo que le gusto mucho, por eso desde niña me decía que si veía algún árbol floreciendo con jacarandas era porque iba a tener buena suerte.
-Fuyu, te puedo preguntar algo?- dijo
-Claro, sin problemas- estaba medio asustado por lo que fuese a preguntar
-¿El señor que te trajo en la mañana es tu padre?-me preguntó- es que no se parecen en nada tu y él
-No, el no es mi padre, peor lo quiero como tal. Mis padres fallecieron cuando yo era bebé así que no se nada más, Hātocu es mi psicólogo y padre- contesté
-Perdón por preguntar no sabía- me dijo mientras veía las flores caer, ella estaba lista para que alguien le tomara una foto, la imagen era tan hermosa y perfecta que no dude en sacar mi celular y tomarle la foto
Al parecer nos habían escuchado porque se nos acercaron unas personas, parecían de esos malos que aparecen en las películas de escuela y romances algo totalmente patético.
-Vaya nos encontramos al del loquero- dijo una chica
-¿Es cierto que tu padre es psicólogo? jajajaja-dijo un chico
Vaya que se querían sentir mucho, tal vez hijos de mami y papi, no se realmente y la verdad que aburrido descubrir que eran no tenía tiempo para averiguar si eran o no.
-Si soy hijo de un psicólogo, si quieres le pido una cita para ver si te ayuda a identificar a loco y una persona- contesté y voltee a ver a Tonal que me vio con una sonrisa
-Vamos Fuyu quiero enseñarte algo- me dijo
Ambos chicos se quedaron callados ante lo que dije y era mejor para mi, no quería problemas. Tonal me llevo a un lugar aún más lindo, ahí se veían tan lindas las flores que no había comparación
-Vaya eres un chico demasiado rudo en palabras que en golpes, has de saber defenderte bien, ¿no?- dijo
-Realmente solo lo aprendí por las películas jaja- conteste
Ella en ese modo tan lindo y curioso hacía que me enamorara demasiado, supongo que más de lo que ya estaba. Tocaron el timbre de entrada a clases y ambos nos fuimos a la clase de matemáticas. Pasaron las horas y llego la hora de la salida, realmente jamás creí que las clases fueran cansadas, solo quería llegar a dormir y dormir pero tenía tarea por hacer.
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Cartas del alma
Novela Juvenilun chico que fue educado por un psicólogo desde que fallecieron sus papás, por cuestiones de su salud mental no tenía permitido salir, así que solo salía a su patio, y siempre veía pasar a los alumnos de un colegio, entonces conoció a una chica, se...