¿Donde?

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Irasue miraba la hora a cada segundo que pasaba, su hijo todavía no llegaba ni recibía una señal, ella llamo a Jaken pero ni el sabía de su paradero, Rin y Kagura lo llamaron por teléfono ya que se supone el vendría una hora después pero nada, el no llego y tampoco respondía el teléfono.

Algo no estaba bien, Irasue estaba muy preocupada por su hijo, había mandado a unos cuantos guardaespaldas a buscarlo, si no lo encontraban llamaria a la policía, el nuevo chófer de Sesshomaru se acerco a Irasue, ella tenía que saber que aquella noche una camioneta negra los venía siguiendo.

-Señorita Irasue- El hablo seriamente e Irasue le presto atención.

-Habla rápido- Contesto ella con un tono de preocupación y angustia por saber si su pequeño estaba bien o mal, esperaba a que solo fuese una broma de Sesshomaru.

-La noche que Sesshomaru llego tarde hubo un problema, una camioneta negra nos venía siguiendo, entonces tuve que desviarme del caminó, no alcancé a decirle algo ya que era muy tarde y usted estaba adentro- El chofer miro la reacción de ella, era obvio que no estaba contenta con lo que el le había dicho, por supuesto debió decírselo antes.

Ella fue directo a su oficina y marco un número telefónico, estaba esperando a que le contestaran.

Su teléfono suena y contesta.
-Irasue, han pasado años-

-Takemaru... ¿Donde diablos tienes a mi hijo?- Pregunto Irasue de manera seria y sin demostrar una pizca de angustia por su cría.

-¿A tu hijo?- El rio un poco, se acerco a Sesshomaru que estaba inconsciente y amarrado en el pisó -Lamento decirlo, pero no se donde- El colgo el teléfono.

Sesshomaru frunce el ceño mientras despertaba, no podía mover sus manos ni sus piernas, le dolia la nuca.
Cuando el abrió los ojos aun se encontraba mareado, no veía bien su vista aun no se regulaba, cuando al fin se reguló miro bien, el lugar se le hacía familiar, pero todo estaba vacío, las paredes, el piso, todo eso para él le era familiar, como si el ya hubiera estado antes allí.

Derrepente el siente una fuerte patada en el estomago que lo deja sin aire, el mira hacía arriba, era un tipo alto y macizo, probablemente uno de los secuestradores.
El tipo levanto a Sesshomaru agarrandolo de la ropa, lo puso de rodillas y le dio un puñetazo en el rostro haciendole un tajo en el labio, Sesshomaru lo sintió tan fuerte que sentía un ligero dolor en la mandibula.

-Ya no eres tan rudo ¿Eh?- El tipo le escupió en la cara, agarra un palo y cuando estuvo a punto de quebrarselo en toda la cara escucha la voz de su jefe, el cual lo detuvo por completo.

-Ya dejalo- Ordeno Takemaru, se acerco a su matón y le arrebato el palo -Con golpes es suficiente, con un palo lo terminamos matando-

Un hilo de sangre bajo del labio de Sesshomaru, el miraba a Takemaru con unos ojos de asesino, le tenía odio, repulsión, tenía ganas de matarlo ahí mismo.

Takemaru miro a Sesshomaru y sonríe como si nada pasara, tiro el palo bien lejos y respiró profundamente.
-¿Me odias Sesshomaru?- Preguntó como si nada malo sucediera.

Sesshomaru no dejaba de mirarlo, se estaba quemando por dentro, lo único que quería en este momento era matarlo por todo lo que el había hecho, por lo que le estaba haciendo.

-Pero antes corrías hacia mí gritando "Tío Takemaru" ¿No es así? Eras un niño muy encantador- Takemaru lo agarró del cabello tirandolo un poco
-Tu madre te obliga a cortarte el cabello... pense que ella sería mas liberal en ese sentido, pero no esperaba más de esa mujer, fue capaz de coger con su marido y con mi esposa mientras tu dormías tranquilo- Terminó recalcando lo último Takemaru.

Ahora si Sesshomaru le prestaba mas atención, era su antiguo hogar, lugar donde el era feliz con su padre y madre juntos, lugar donde el corría, jugaba o lloraba por berrinches, y ni la pintura de las paredes ni el piso habían cambiado, todo seguía igual, solo que con algunos desgastes en las paredes, el piso estaba sucio y había mucho polvo ¿Como no lo noto antes? Se sentía estupido por no notarlo, pero ¿Como podría saberlo? Si esta casa la habían dejado hace años.

Takemaru saco un collar de mascota, lo miro con detenimiento y río un poco, se acerco a Sesshomaru y se lo puso en el cuello, lo hacía para burlarse pero también lo hacía para vengarse, a pesar de los años aun estaba sediento por venganza hacía lo que le hicieron.
-Buen cachorro... ¿Sabes? Tu tienes un medió hermano llamado Inuyasha, tu padre es un degenerado- Finalmente Takemaru fue por aquel palo que habia lanzado lejos, lo miro bien y luego miro a Sesshomaru, se acercó a el mientras sostenia el palo con firmeza.

Cuando el alzo el palo para golperlo en la cabeza, Sesshomaru cerro los ojos con la respiración algo acelerada, pero el ruido de la puerta cayendo de golpe, un fuerte estruendo de un arma de fuego y el sonido del palo cayendo a pisó.

-¡Alto policía!- Grito el oficial con arma en mano apuntando a Takemaru, ya le había disparado, justo en el brazo.

El peliplateado al habrir los ojos, vio a Takemaru apretandose el brazo por el disparó, cuando el oficial iba a disparar de nuevo en un abrir y cerrar de ojos lo comenzaron a acribillar.
Los matones de Takemaru entraron para sacarlo, uno de ellos se acerco a Sesshomaru para sacarlo pero el matón recibió un disparó en la cabeza, había un francotirador a lo lejos.

-Tks... dejenlo- Ordeno Takemaru saliendo lo mas rapido posible de aquella casa.

Más policías entraron y se acercaron a Sesshomaru, lo desataron y se lo llevaron.
El no mostro ningún gesto, pero en el fundó se había asustado, el lo único que quería en este preciso momento era llegar a casa con su madre, ver a Rin y a Jaken. Al peliplateado lo llevaron con una ambulancia para asegurar de que el no tuviera a alguna herida grave, por suerte no tenía ninguna a excepción de un corte que tenía en la nuca, tenía algo de sangre pero no era mucha, el enfermero que lo estaba chequeando comenazo a limpiarle esa herida, Sesshomaru se quejaba un poco.

Irasue llego en auto para recoger a su hijo, ella se había tragado todo el susto, habian raptado a su hijo y Takemaru logro escapar, ella se acerco a el y lo abrazo.
El se dejo abrazar sin decir absolutamente nada, en realidad era lo que el necesitaba, un simple abrazo de su madre, uno que le decía que todo estaba bien, que no tenía que preocuparse por nada en este momento.

Ambos volvieron a casa, ya era algo tarde y Sesshomaru estaba totalmente agotado, Rin y Kagura estaban en clases, Kohaku también.
Como era algo tarde Sesshomaru decidió acostarse temprano, Irasue también, ambos a sus habitaciones el cuales estaban algo alejadas, en la casa había un completo silencio.

Pasaron algunas horas y el peliplateado no podía dormir, daba vueltas por su cama desordenandola por completo, finalmente se quedó quieto mirando el techo de su habitación hundiendose en sus pensamientos ¿Por que le pasaba esto a el? ¿Que culpa tenía? Eran preguntas que no lo dejaban dormir, menos ahora con lo que le pasó, después de lo que pasó con su padre, penso que nunca más se tendría que preocupar por miedo a que le hicieran algo.
Pero al parecer el destinó no quería que el estuviera tranquilo, en Noruega sus compañeros le decían aburrido por no hacer las cosas que sus compañeros hacían, por no hacer las cosas que un joven comun y corriente hacía, el tenía en su mente otras cosas, como por ejemplo ser mejor que sus padres en muchos aspectos, el no dejar que nadie lo humillara, pero por supuesto las cosas comenzaron a cambiar en el cuando comenzó su supuesta relación con Rin, el aveces no lo notaba, pero Rin lo hacía cambiar, lo que no le gustaba le terminaba gustando solo por Rin.

El trataba de dormir, pero como se dijo antes no podía, el al cerrar los ojos se le venía a la mente el miedo de despertar amarrado otra vez, el tomo su teléfono y busco el número de Rin, iba a marcar hasta que vio la hora, entonces el dejo su teléfono de lado y suspiró.
No sabía que hacer, también podía admitir que tenía frío y se sentía muy solo.

Sesshomaru se levantó, salió de su habitación y miro el pasillo oscuro, había un silencio enorme, cualquier paso que el diera se escucharía fuerte, pero eso no importaba ahora, camino por el pasillo, llego a la habitación de su madre, dudo inos instantes pero finalmente habrio la puerta y entró.

Su madre dormía, el se acerco y se acosto en su cama, se acurrucó cerca de ella, cerro sus ojos y finalmente se quedo dormido.

El Destino De Conocerte (Sessirin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora