Un, Deux, Trois [Albedo x Aether]

Capitulo Único

Esta era de esas extrañas veces en las que podía a encontrar a Albedo fuera de su investigación, en Mondstadt y sin dibujar, por no decir que era más que nada algo imposible...dado que si el chico no estaba en su investigación estaba resolviendo los problemas que ocasionaba la pequeña Klee, mas aun, era todo un espectáculo verle entrenar, siempre se había preguntado de donde salían aquello movimientos tan elegantes que poseía el alquimista, le recordaba a un arte que había aprendido en el pasado junto a su hermana.

— Paimon piensa que Albedo es impresionante, ¿verdad, viajero?

— Estoy de acuerdo, es una vista muy ¿elegante? ¿se dice así?

— ¡Sí! Paimon esta feliz de que estés aprendiendo tantas palabras.

No puede evitar reír un poco ante lo que su compañera de viajes dijo, realmente aun había palabras que no conocía, muchas de las más complicadas las había aprendido de Albedo y el ex-arconte Geo, algunos insultos incluso los había aprendido de Diluc y sus compañeros de aventuras cuando iba a Espinadragon, aunque allí era bastante común escuchar como alguien llegaba a insultar todo lo conocido si se metía al agua solo por tomar un atajo para cruzar la montaña, aun recuerda la cara de Xiao o Zhongli cuando escucharon al educado Xingqiu maldecir a todo lo que se le había cruzado en frente a la hora de tener que cruzar las frías aguas del rio a las faldas de la montaña, las maldiciones solo crecieron luego de que Zhongli dijo que podía poner un pilar.

Otra cosa que se le hacía algo complicado era la lectura, su cerebro aun estaba levemente adecuado a otro tipo de escritura, por suerte fue mucho más rápido luego de que Paimon, Jean y Lisa le enseñaran a como saber que letra era cada símbolo, sabiendo las palabras la lectura fue bastante rápida.

Volvió a mirar hacía el campo de entrenamiento desde lo alto de la cede de los caballeros, ver a Albedo practicar su modo de lucha era realmente gratificante y vigorizante, aunque cuando no lo encontró se extraño para luego pegar un pequeño grito algo agudo, sucede que el alquimista lo había visto de alguna manera y había usado sus flores para subir, de todos modos, ni siquiera lo escucho.

— Albedo...dioses, ¿Cómo nos viste?

— Su compañera de viaje habla...bastante alto y supuse que se encontraría aquí.

— ¡Paimon no habla alto! ¿verdad?

El silencio se extendió entre ambos chicos y la pequeña chica hizo un bufido, desapareciendo en el aire algo indignada posterior a ello, sacando una risa silenciosa de ambos, aunque tuvo que agarrar a Albedo cuando casi resbala por el tejado.

— Cuidado, hace no mucho dejo de llover.

— Si, me di cuenta al subir, es sorprendente que hayas podido escalar hasta acá... ¿acaso tiene ventosas en los dedos viajero?

— ¡Albedo! No~, solo hice uso del punto de teletransporte que hay aquí, venía escapando de la lluvia que azotaba a Liyue suponiendo que aquí ya había pasado.

— Mm...interesante.

Nuevamente se quedaron sin mas palabras por su parte aun estaba descansando de haber corrido por todo Liyue antes de la lluvia y por el hecho de haber usado el teletransporte, aquello le dejaba muchos dolores de cabeza, cuando se iba a tapar la boca para bostezar sintió un jalón en su mano y se dio cuenta de que tenía al alquimista aun agarrado de esta, podía ver un leve tono rojo que le pareció extraño, pero ignoro por completo.

— ¿Pasa algo?

— Oh, bueno, me preguntaba porque me estabas observando y hablando de mi con tu compañera.

— Oh~, tienes curiosidad de ello. Bueno, solo comentábamos que era un espectáculo elegante verte practicar, aunque siempre me he preguntado algo.