Ella Es Mi Calma ©

Capítulo 4.

Capítulo cuatro

Aaron García.

Bajo de la camioneta, él aeropuerto lleno de gente entrando y saliendo, Lucas y Megan vinieron conmigo, Mamá se despidió en casa, casi llora, son muy sentimentales.

—¿Porque me vez así? —Pregunté mirando a Lucas.

—Creo que se me metió algo en el ojo —Dijo secándose las lágrimas. Megan baja del carro riéndose de Lucas. Yo solo empecé a bajar mis maletas la cual Megan me ayudaba a bajar de la camioneta.

—Tomare un taxi, me quedaré con él hasta que tome el avión —Le dijo Megan mirándolo por la ventana.

—¿Estas segura? Puedo llevarte a casa y luego ir al trabajo no hay problema —Ella le niega con la cabeza.

—Tomaré algún taxi —Después de Megan decir eso Lucas hace una mueca y me observa y vuelve a observarla y ambos ríen un momento.

¿Que estarán hablando?

Lucas baja de la camioneta y camina hasta quedar al frente de mi. Yo baje mi mirada. Él estaba ahí parado, no se que decir.

—Este es un hasta luego ¿no? —Subo mi mirada, estaba con sus ojos llorosos.

—¿Porque lloras? solo me iré por un año a terminar de estudiar, no me he muerto —¿que carajos dices? Claro que va a llorar, su pequeño hermano se va, desde niños jamás nos hemos separado.

—Sabes, desde que éramos niños jamás nos hemos separado de mamá. Es por una buena razón así que no tengo excusas para que te quedes —Suspira profundamente.

—Si teníamos una excusa, yo podía trabajar, podía ayudarte, trabajaría en un bar o algo en la noche para ayudarte en la casa y nos turnáramos con mamá. Pudimos haber hecho eso y-.

Su mano atrás de mi cabeza me empuja a su pecho sin dejarme terminar de hablar dejándome impresionado.

—Termina de estudiar y regresa rápido, cabeza hueca... —Mis ojos se humedecieron rápidamente que no me dio tiempo de fingir. Él me abrazaba y yo no me movía, me sentía raro, tenía un sentimiento extraño en mi pecho. Se separa de mi después de unos segundos con sus manos en mis hombros inclinándoselas un poco para quedar cara a cara—. Mamá tiene que ver ese diploma, así que aprovecha la oportunidad que te dan, —Él me miraba sonriente—. Te brillan los ojos, Aaron. —Dijo con una sonrisa.

—Es que se me metió algo en el ojo —Dije mirando a un lado secándome las lágrimas con la parte de afuera de mi mano. Carajo no llores. Esnifé mirando a Lucas otra vez. Estaba haciendo un puchero, me le quedo viendo—. Eres un idiota —Dije bajando mi mirada con una pequeña sonrisa. Mire mi reloj, ya debo entrar, son las doce y quince.

—Tengo que trabajar —Dijo empezando a caminar a la camioneta. Me le quedé viendo unos segundos montándose en la camioneta.

—¿No le dirás nada más? —Dijo Megan parándose a mi lado.

—¿Que se supone que debería decir? ¿Adiós hermanito te quiero? —Ella se quedo mirándome con sus brazos cruzados encima de su pecho como diciéndome "lo mínimo que deberías decir es eso"—. No dire eso —Dije agarrando mi maleta y empezando a caminar hacia el aeropuerto.

—No lo verás por un año, ¿has pensado eso? —Me quedo parado al escuchar eso. Tenia razón, aunque lo podré llamar en videollamada no seria lo mismo. Me volteo viendo la camioneta.

—¡Lucas! —Grite y el me mira con intriga. ¿Que digo?, ¿te quiero?. —Los... —Me quede callado unos segundos mirando a Lucas. —Cuídense —Dije y después de unos segundos el sonríe y asiente con la cabeza empezando a manejar.