48

137 7 7
                                    

Jayne

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Jayne

Habíamos decidido realizar un viaje a un campamento, más que nada acampar un fin de semana. Rose dio la opción y nos invitó a un lugar donde son asociados sus padres. La entrada era un portón blanco gigante que cercaba cierta parte de él con un edificio en medio que estaba lleno de algunas habitaciones . Al rededor lo acompañaban cientos de árboles y una fuente con una figura peculiar de un oso se veía en la entrada.

La brisa pegaba suavemente sobre mi cabello, Emma estaba a mi lado con unos shorts de tiro alto y una camiseta rayada de colores mientras yo traía también un short y un top negro con mi cabello suelto. No había decidido buscar mucho en variedad de ropa para acampar solamente un fin de semana. Además de que he tenido otras cosas que pensar...

Rose estaba aún bajando algunas cosas y asegurándose de que nuestra camioneta estuviera bien estacionada junto con Kane y los chicos. Emma estaba a mi lado mientras los esperábamos cerca de la entrada del campamento de la asociación de padres a la que pertenecían los padres de Rose. Accedieron a que podíamos asistir usando sus cuentas como regalo para Rose por su cumpleaños hace poco.

—Jayne, ¿tú no te has llegado a sentir algo rara apenas pisamos aquí?—Emma suelta a mi lado y después tira un suspiro—no se, siento que me mareó un poco el camino.

—Es algo extraño, yo no siento eso ya que no estuvimos más de una hora ahí. Quizás comiste algo que te hizo mal, ¿no crees?

—Es extraño, los viajes no suelen marearme mucho—mencionó y arrugó un poco sus cejas mirando hacia abajo—tal vez solo soy yo.

—De todas formas si te sientes mal podemos ir a algún lado del campamento, supongo que tendrán alguna enfermería.

—¿Lo crees?—asiento ante su pregunta—Supongo que se me pasará después.

—¿Acaso esto no es una joya?—menciona acercándose a nosotros el amigo de Rose—Tenemos tiempo sin venir aquí, pero se que les gustará, hay una Reserva cerca de aquí por si no queremos quedarnos en habitaciones.

Rose había invitado a un amigo de su infancia, con el cual había pasado la mayor parte del tiempo cuando era una niña. Se llamaba Oliver. 

Los chicos vienen hacia nosotros con sus mochilas y una hielera.

—Podríamos pedir la reserva, es como estar al aire libre en casas de campaña solo que cuidan un poco sobre los animales salvajes y esas cosas—nos hace saber Rose—de todas formas, podemos disfrutar un poco por aquí.

—Como sea, yo no quiero esas gilipolleces de estar apartando en una casa de campaña los hombres y otra de mujeres—menciona Jayden—quiero estar con Emma y disfrutar el paisaje eso es todo.

—De igual forma podemos ir a la recepción y ver algunas cosas turísticas que se encuentren  por aquí cerca, nos podrían dar un guía si no mal recuerdo.

Tú ,mi destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora