Perfecta Imitadora

CAPÍTULO 10 || El Sueño ||

- ¿Cariño, que pasará con las niñas?, sé que Cristal es lo suficientemente grande para cuidar bien de Kristin, pero dejarlas solas es muy peligroso. - dice mi madre con preocupación caminando de un lado a otro.

- Lo sé, por eso he llamado a Maikol, el cuidará de ellas junto con Clarissa - ¿es papá?... espera esto es un sueño, una pesadilla, un recuerdo, un juego de mi mente... que coño es esto? puedo ver como mi papá esta recogiendo algunos papeles de su despacho y guardándolos en sus portafolios.

- Bien, pero de todos modos, ¿Por qué tenemos que ir nosotros a resolver este asunto? - mi mamá está a punto de llorar cuando mi papá ya la esta rodeando por la cintura en un abrazo.

- Sé que es complicado, tesoro mío - toma su rostro entre sus manos y le limpia una lagrima que estaba por caer por su rostro - pero esta es nuestra vía de salida a una vida tranquila, podremos estar con ellas por el resto de nuestras vidas, disfrutando de una café por la tarde en una casa en el campo, tomados de las manos, llenos de arrugas por lo viejos que estaremos, viéndolas a ellas con sus parejas, quizás en caso de que ellas así lo deseen podremos ver a nuestros nietos jugar junto a ellas... después de esto tendremos la vida entera para dedicárselas a ellas. - noto su ilusión y tristeza al decir esas palabras.

- no me cansaré de decirlo, eres el hombre más maravilloso e imaginativo del mundo, nuestras pequeñas detestan a los niños más pequeños que ellas - madre ríe con un tono de tristeza en su voz, las ganas de correr hacia ellos y abrazarlos es inmensa, pero estoy para como una piedra aferrada al suelo esperando a que alguien con la suficiente fuerza la pueda mover, mi cuerpo es tan pesado, mi corazón se estremece por querer abrazarlos.

Ellos están por subir al auto y me veo a mi de hace unos años correr hacia ellos y abrazarlos a los dos, les pido que no se vayan, siempre estaba acostumbrada de que viajaran por asuntos del trabajo, pero esa vez... esa vez mi corazón me dijo que no los dejará ir, sentí que no iban a regresar conmigo, sentí demasiada desesperación al ver como salían por la puerta principal con sus maletas, no quería que se fueran, quería que se quedaran junto conmigo y Cristal... hacia de todo por poder convencerlos de que se quedaran, Cristal venia de tras de mi con los ojos hinchados de tanto llorar por el hecho de que ellos se fueran.

- Por favor, mami, papi - me aferre a los pies de mi padre y este me tomo por mi brazos y me abrazo, con tierno beso en la cabeza me dijo suavemente que todo iba a estar bien, que cuando volvieran de su viaje íbamos a ir a acampar en el bosque, luego de ir al parque de diversiones que hay en la ciudad,

todo es mentira, mientes, mientes, mientes. mientes!!!!! no estas conmigo ya, no has vuelto, te esperé... te esperé con todas mis ansias, soñaba con verlos llegar por la puerta de la casa, e imaginarme a mi corriendo abrazarlos y que me dijeras que todo estaba bien, que estabas aquí, QUE ESTABAN AQUÍ!!!!!... yo solo quería que estuvieran conmigo, no pedía nada más, solo quería tener a mi familia conmigo, quería disfrutar de sus historias locas, quería disfrutar de un atardecer tomando limonadas, y meciéndonos en las hamacas que colocaríamos en el patio de la casa, viendo como madre y Cristal intentan hacer una casita de maderas aunque ambas saben perfectamente que no son buenas con las manualidades...

- ¿Quién más sabe sobre eso? - que demonios, como es que pase de estar suplicándole a mis padres que se queden, ahora estoy en una puta escena de una película de matones, que diablos pasa con esta puta pesadilla de mierda, yo solo quiero despertar ya - DIME!!! - mi corazón se acelera al escuchar esos gritos, pero ya no estoy como una piedra para nada más, estoy atada a una silla con cadenas en los pies, estoy sangrando mi pierna derecha, pero como diablos no, si tengo un puto agujero en el muslo.

- Nadie más, solo suéltala por favor - ambos figuras se giran hacia mi, no puedo distinguir sus rostros, pero esa voz cansada se me hace conocida, pero mi mente no quiere identificarla o más bien no quiere aceptar el hecho de que la reconoce perfectamente, es la misma voz que me cantaba todas las noches una canción antes de dormir... es papá, pero que diablos esta pasando porque estoy viendo esto? es una pesadilla rara, pero jamás en mi vida había sentido esto o pasado por esto.