Sobre ti || Eruri

01

Actualmente 

–A la mañana de mi nostalgia, escribí sobre ti, el extremo opuesto de mi pecho vislumbro, la luz por encima de tu cuerpo, llevabas flores para sorprenderme, solo que esta vez pensé que no regresarías, y me encontré echándote de menos.
Me pediste que no te salve, te sostuve, como brazos ajenos, porque te tenia, porque te pienso, porque tu imagen esta y aunque este, eres mejor que todas ellas; porque llegas donde quiera y yo llego porque me quieras "si pudiera volver hacia atrás, te besaría con los ojos cerrados para que no descubras que mañana está lloviendo"–

Antaño

-Eren te he dicho mil y una veces que la bolsa de tierra la dejes sobre el tapete- Aún por la tarde sigue siendo imposible para mí tratar de hacer entender a un niño-

-Los siento Levi, lo olvide- Pronto la tomo en brazos dejándola sobre el tapete anaranjado- Noté que se estaban terminando las Camelias ¿quieres que vaya al cultivo por más?- Tengo que decir que a pesar de que el niño es un tronco torpe, termina enterneciendome que sea servicial, pero aún así no deja de ser un tonto-

-Eren estamos en  Abril, no es temporada de Camelias- Lance alguna rama que tome del mostrador y él rio bajó- Vete a casa, seguiré haciendo el inventario y arreglaré la agenda de pedidos-.

-¡Sí capitán!- lo ví desaparecer por la puerta trasera al almacén de la tienda, Al parecer está semana la venta de rosas había sido mayor que las otras, ¿que será?- Entonces me voy jefe, lo veré el Lunes- Cuando lo ví había quitado aquel delantal de su cuerpo y ahora solo estaba con ropa casual-

-Bien, que tengas buen fin de semana- El comenzó a correr fuera de la tienda tan pronto dije eso, mocoso- Ten cuidado idiota- él solo movió la palma de alguna manera indicando un adiós al ver la hora a penas pude soltar un suspiro agradable, después de todo pronto el atardecer aparecería tras las nubes, y yo, tendría que cerrar un poco antes de que eso pasará. Al volver a la libreta el toqueteo de unos dedos sobre el mostrador hizo que acabase con el inventario en un abrir y cerrar de ojos- Bienvenido- Sin poder creer el hermoso rostro que se alzaba en un abrigo Gris y debajo un traje, quedé boquiabierto- Ah, lo siento, ¿q-que es lo que busca?- El movió una se sus manos a su mentón mirando las flores al rededor-

-Camelias rosas- por instinto mire hacia el lugar, y luego a él, sus ojos profundos me hacían sentirme algo intimidado al igual que sus rasgos fuertes mierda... Salí del mostrador tomando uno de los papeles para envoltorio de color café poniendo Camelias formando un ramo- Quiero poner una rosa en el centro- Dijo aquel rubio con la voz más bonita que había escuchado nunca, asentí con la cabeza yendo a las rosas rojas probablemente sería un regalo para su novia u esposa ¿no?- Son para mí esposa- Y bueno, tal y como mis ilusiones de este hombre habían llegado, cuando dijo eso, realmente no se fueron del todo, una vez más flechado por un heterosexual-

-Son lindas, al regalarlas se toma como un símbolo de admiración y belleza, mientras que las rosas reflejan a los amantes apasionados- Acomode con alegría el ramo mirando las flores pude aprender cada uno de los significados de las flores gracias a mis padres, corte el tallo de una de las rosas poniéndola justo en medio- Ya está- camine despacio hasta el mostrador poniendo el ramo sobre el mismo- son 1113¥- Él asintió-

-¿Aceptas tarjeta?- Asentí con ligereza mirando directo a sus ojos, estoy seguro de que de alguna forma estoy ruborizado- Aquí- Estiró su mano con una tarjeta negra dios. Tomé la tarjeta al cobrar sus ojos paseaban al rededor de la tienda, lucía algo inquieto.-

-Ya está, aquí tienes- Él sonrió amigable-

-Entonces gracias, que tengas un excelente día- Pronto sus pisadas se alejaron así como llegaron tal y como un amor platónico suspiré profundo, escuchando el motor del auto alejándose.- 

Citado de las comillas al principio del capítulo:

-Chris Pueyo, 2017, aquí dentro siempre llueve 

–Mirio