Bienvenido a Mi vida

Recuerdo el ayer

Cuando era pequeña me gustaba demasiado visitar a mis abuelos, por qué de camino a ahí podría crear historias. Llegar a casa era genial, por qué te recibían con los brazos abiertos, esa sensación de los brazos cálidos de ambos envolviendo todo mi cuerpo, era, increíble, un lugar lleno de paz, que me permitía viajar a lugares tan extraordinarios a pesar de solo estar en un mismo lugar, lo que más me gustaba de ahí, era el cuarto en dónde solían dormir mamá y sus hermanos, por qué siempre que llegaba ahí me recostaba sobre la cama y era muuuy reconfortante, el jardín, que a pesar de que tenía sólo un cultivo pequeño era interesante que guías envolvieran gran parte de la casa, los juegos de Scrabble al atardecer con mi abuela y las charlas largas e interesantes con mi abuelo, sentía que aprendía demasiado con ambos, porque los dos tenían muchas cosas que contar, y mi abuelita muchísima información dentro de su hermosa cabecita. También me gustaba mucho las visitas de mi tío porque venía mi primo, era muy divertido Jugar con el, por qué me sentía adaptada con él y por ende creía que todas las personas en la ciudad eran igual a él por lo que creía que en esa ciudad habría personas más geniales, era genial por qué sólo llegaba a esa ciudad y mi imaginación se abría en grande.

La vida en mi pueblo creía que era un poco estresante por que a pesar de mis 11 años de edad sabía qué era la hipocresía, esa que te brindaba la humanidad, y a pesar de que tú edad no sea de 15 años la comienzas a sentir desde que vas creciendo. Cuando te das cuenta de que las verdaderas amistades no existen comienzas a buscar en tú interior, y te das compañía a tí mismo.
Comencé a hacer Yoga (y no una Yoga muy elaborado sino, con videos que te encuentras en YouTube), a escuchar música mientras me rodeaban las personas, leía un poco de algunos libros, cantaba en mis tiempos libres, escribía en algunos tiempos libres y dibujaba en mis otros tiempos libres.

Quizá lo que hacía no lo hacía también pero proporcionaba mi tiempo para estar en todo lo que me gustaba hacer y hacía un poco de todo.