Capítulo 3

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Habíamos llegado a la fiesta y estaba repleto de gente (más de lo que podrían imaginar) y esto puede ser un tanto agobiante para mí, pero intentaré pasarla bien y olvidarme de mis problemas al menos un momento.

-¡Miren, ahí están los chicos del salón!- señaló Mike y caminamos hacia ellos.

A pesar de toda la gente se podía sentir un buen ambiente, lo que era bastante bueno.

Una vez llegando con ellos, comenzamos a conversar mientras tomábamos nuestras bebidas.
Mientras reía por algo que había dicho uno de lado chicos, mi mirada se centró en ella...
No estaba equivocado, ella iba a venir, a su lado estaba la chica de hace unas horas y un chico bastante alto y con el semblante serio.

¿Tenía novio o solo era su amigo?

Al instante mi semblante cambió a uno serio, uno parecido al del chico.

¿Por qué me importaba demasiado que ella hubiera llegado un chico? Y aún más, ¿por qué me importa si ese chico es su novio?

-¡Hey, Bieber!- Jordan llamó mi atención- ¡¿Todo bien?!- habló en tono alto porque la música estaba bastante fuerte.

-¡Sí!- grité en respuesta y despegué mi mirada de ellos- ¡Solo que olvidé decirle a mi madre que ya había llegado aquí, ya sabes, no me gusta preocuparla!- buena excusa, Justin.

Claro que le había avisado a mi madre que había llegado a la fiesta mediante un mensaje de texto, pero no quería tocar el tema de la chica y menos decir que ella se encontraba aquí.

-¡Pues deberías mandarle un mensaje!- ahora Michael se metió a la platica.

Ambos ya habían tomado un par de cervezas y estoy seguro de que ya se les había subido un poco el alcohol. Yo solo me había tomado una, no me gustaba rebasar mi límite y como lo dije anteriormente, quería disfrutar de esta bienvenida y recordarla, no como mis amigos que estoy seguro de que no recordarán mucho de lo que está pasando.

-¡Le mandaré un mensaje, no te preocupes!- sonreí y él asintió alzando ambos pulgares como si estuviera aprobando lo que dije.

Idiota.

Regresé mi vista a cierta chica y su grupo de amigos y pude ver cómo bailaba al ritmo de la música y sonreía mientras platicaba con su amiga.
No voy a negarlo, ella se veía preciosa.
Su otro acompañante tenía una cara de desesperación, por lo que puedo decir que no estaba feliz con estar aquí.

Un empujón hizo que saliera de mis pensamientos y miré con enojo a mi compañero llamado Rocky.

-¡Lo siento amigo, fueron ellos los que me empujaron hacia ti!- señaló hacia Mike y Jordan, y yo bufé.

Apuesto a que me habían descubierto viendo a la chica.

-¡Ya vimos porque no nos haces caso, Bieber!- en efecto, ya me habían descubierto.

-¡No les hago caso porque están borrachos y no llevamos ni dos horas aquí!- respondí y ellos alzaron sus manos en señal de rendimiento.

Nuevamente volteé y ella ya no estaba ahí, ni siquiera su amiga o su acompañante, ¿ya se habrá ido? Como lo dije, no llevamos ni dos horas aquí y se me hace raro que se haya ido.

Suspiré y mire a los tontos amigos haciendo estupideces.

¿Qué me está pasando?

[...]

Había caído la noche y yo me encontraba llegando a mi casa luego de llevar a ese par de idiotas a la suya y escuchar como los regañaban por llegar en ese estado de ebriedad, aunque he de decir que fue muy gracioso por las caras que hacían.

Entré al living y me encontré con ni madre dormida en el sillón con el televisor encendido, supongo que se quedó esperando a que llegara.

Apagué el televisor y me acerqué a ella lentamente para despertarla.

-Mamá- susurré y ella abrió los ojos soltando un brinco. La había espantado.

-¡Justin!- puso una mano en su pecho y fue inevitable no reírme de su reacción.

-Lo siento- tomé un gran respiro para dejar de reír.

-¿A qué hora llegaste?- preguntó sentándose en el sillón.

-Hace cinco minutos, es que tuve que dejar a Mike y a Jordan en sus casas-

-¿Tomaron mucho?- levantó una ceja y yo asentí.

-Sabes que a ellos les gusta tomar demasiado- me encogí de hombros.

-Bueno, será mejor que descases porque mañana trabajas todo el día y no quisiera que te duermas- bromeó y yo sonreí.

-Tranquila, eso no pasará- solo suele pasarme en las clases que son más aburridas, pero en el trabajo jamás.

-Buenas noches- se acercó a mí y besó mi mejilla.

-Buenas noches, ma- besé su frente y ambos nos dirigimos a nuestras habitaciones.

Al entrar a la mía lo primero que hice fue quitarme los zapatos y aventarme a mi cama.
La había pasado bien dentro de lo que cabe, pero había terminado exhausto.

Bieber está enamorado, Bieber está enamorado- Jordan.

Me había llegado ese mensaje de Jordan hace unos minutos y sabía que el alcohol seguía en su sistema, estoy seguro que estando en sus cinco sentidos no me escribiría eso.

Mejor duérmete y deja de escribir estupideces- Justin.

Había entrado a Facebook porque un compañero del salón había subido una foto con nosotros y nos etiquetó. Bajé un poco más por mi inicio pude ver que cierta chica había subido un par de fotos también; en una de ellas salía con su amiga, pero no dentro del lugar donde fue la fiesta, sino que afuera, y en la otra salía con el chico...
Y como soy muy curioso, me metí a las etiquetas de las fotos y pude ver el nombre del chico.

Harvey Baldwin.

Soy un idiota.

El chico es su familiar.

¿Pero por qué me importa de todos modos?

Solté un gran suspiro y bloqueé mi celular.

Ni siquiera yo me estaba entendiendo, no sabía qué me estaba pasando y me estaba comenzando a sentir confundido...
Bueno, confundido he estado desde que la conocí, pero realmente no sé qué es lo que siento y no sé si sea bueno descubrirlo en estos momentos con una lata y media de cerveza en mi sistema. No estoy borracho ni nada por el estilo, pero no creo que hoy tenga que ser el día en que descubra mis sentimientos por ella y los entienda.

Solo espero no hacerlo demasiado tarde.

Está bien, Biebs. Descansa, besos- Jordan.

Es un idiota.

Deserve You- JaileyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora