Prólogo

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Desde hacía una semana que todas las mañanas desde aquella cocina se podía ver una espátula volar hacia afuera y un montón de ollas sonar mientras un grito lleno de improperios se dejaba escuchar bastante molesto, se podía ver como otro pastelero ...

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Desde hacía una semana que todas las mañanas desde aquella cocina se podía ver una espátula volar hacia afuera y un montón de ollas sonar mientras un grito lleno de improperios se dejaba escuchar bastante molesto, se podía ver como otro pastelero salía furioso de ese lugar, dejando el uniforme sobre la barra para salir sin siquiera despedirse y maldiciendo su decisión de haber ido a pedir trabajo a ese infierno de lugar.

La ceniza que había presenciado aquella discusión entre su hermano mayor y el que se suponía era el nuevo pastelero solo suspiró hondo, tomando la ropa que el hombre había dejado momentos antes de irse para comenzar a doblarla de manera lenta frente a la puerta que daba a la cocina, frunciendo el ceño como pocas veces lo hacía y siendo esas pocas veces siempre con su hermano mayor o con su madre pero en esos momentos era con el primero.

Otro pastelero que te consigo y que también se va por tu mal hablada manera de dirigirlo Comentó Katsumi en alto para su hermano. Eres un idiota, Katsuki.

Cállate Katsumi, nadie te pidió que trajeras un bastardo inútil a ayudarme en mi cocina Respondió Katsuki saliendo de su lugar de trabajo para verla con el ceño fruncido.

Tú mismo muy directamente, aunque pienses que es de manera indirecta, pides que te consiga un ayudante y eso hago Reprochó la chica viéndolo molesta. ¡Pero me estoy cansando de que siempre rechaces a todos los que te traigo!

¡Entonces comienza a buscar gente que sepa trabajar a mi ritmo! Reclamó Katsuki cruzándose de brazos.

Ambos hermanos se miraban bastante molestos, llevando el ceño fruncido y los brazos cruzados, mirándose mutuamente mientras ambos eran observado por la clientela de esa hora quienes estaban acostumbrados a esas típicas peleas y que no eran tan valientes como para ir a calmar a los dos hermanos cenizos, el último que lo había tratado de hacer salió con dos gritos en el mismo tono de voz y un par de insultos viniendo de ambos hermanos, el pobre chico salió corriendo del lugar y nunca más se me vio entrar ni pasar por aquella pastelería. Una lástima, pensaban algunos.

En algún momento todos los clientes se dieron cuenta de aquel chico peliverde que nunca habían visto por la pastelería y que no sabían de dónde había salido, pero el pequeño se encontraba dirigiéndose hacia los hermanos con un papel en la mano y sin darse cuenta de la pelea de miradas entre los hermanos que no duró demasiado porque el mismo chico terminó llamando la atención de ambos hermanos cenizos.

Sumi-chan, Kacchan ¿De nuevo están peleando en el trabjo? Cuestionó el chico cruzándose de brazos.

Los clientes se tensaron por la confianza con la que el chico les hablaba a los hermanos y rezaron en silencio por la vida tan corta que había vivido, porque era obvio que nadie se salvaba de hablarle de aquella manera a ninguno de los hermanos Bakugou.

¡Izu! Exclamó Katsumi alejándose de su hermano para prontamente negar a la pregunta del peliverde.

Deku, ¿Qué mierda haces aquí? Cuestionó Katsuki como si no hubiese estado discutiendo hace un momento con su hermana.

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⏰ Última actualización: Aug 17 ⏰

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Una cocina explosiva [KatsuDekuKatsuFem]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora