Mi psicóloga es una Conejita Playboy

El Comienzo

Suena el cronómetro y caigo en cuenta de que la terapia acabó. Hoy por fin es el último día en el que la señora que Jonhson será mi psicóloga. De mañana en adelante Van a traer a otra, sabrá Dios si otra vieja loca. Su nombre era algo como Tiara o Tara ni me acuerdo, pero me imagino que se va a ir pronto, ya que cuando no nos gusta la psicóloga, Dickson, Carl y yo planeamos algo como acoso o abuso a nosotros y las echan. Si no me equivoco ésta es la quinta que despiden en este mes.

Sra. Jonhson- Bueno Daril, la terapia ha finalizado. Espero que te gustara por lo menos ésta última- Dijo con coraje.

No le contesté, solo le sonreí. Odiaba esas señoras aburridas y casadas.
Salgo y me diríjo a mi habitación, sí, estoy en un centro de reabilitación ya que he estado muy cerca de la muerte y según mis psicólogas tengo un trastorno de personalidad. Mientras me tómo los medicamentos que me dejan por los traumas, Dickson entra.

•Dickson- Hey bro, ojalá la próxima psico esté bien buena para darle pa' bajo.
•Daril- Tu siempre pensando en tirarte a las psico y yo loco por salir de aquí y meterme a uno de esos clubes y conseguirme a un mujerón que se disfraze para mi.
•Dickson- Bro eso es mucho pedir, yo me conformaria con una psico bien buena.
•Daril- Tipo deja eso, parece que no lo has hecho en siglos.
•Dickson- Bro, para mi parecen siglos.
•Daril- Bro- dije con un tono burlon- te acostaste con la enfermera ayer.
•Dickson- Uff, esa gata salvaje, si me deja nos vamos a su oficina de nuevo. Como sea, parecen siglos.
•Daril- Ya, ya, dejate de eso y vete que tengo que dormir.
•Dickson- Dale bro, descanza, mañana tenemos que ver si la nueva psicóloga se queda o se va.

Me acomodo en la cama y cierro mis ojos. A ver con que vieja me encuentro mañana.

Al otro día, me levanto, me lavo la cara y los dientes y salgo para desayunar. Después de desayunar me llamaron para ir a la psicóloga. Todos los días tengo horarios diferentes y hoy seré el primer paciente de la nueva. Tara o Tiara, como sea.

Spencer, la secretaria de todas las psicólogas que han pasado por aquí y una de las más que me he tirado, abre la puerta. Una rubia con ojos celestes y un cuerpo irresistible me saluda.

•Tara- Hola, mucho gusto mi nombre es Tara Strong- me dice con una sonrisa bellísima.
•Daril- Hola, mi nombre es Daril Summer como pudiste ver en el registro.- dije algo impactado por sus enormes pechos mientras ella ojeaba unos papeles.
•Tara- Te puedes sentar no muerdo, aún, ya que todavía no tengo hambre, por ahora.

Me senté y empezó el cronómetro a sonar. No podía concentrarme en otra cosa que no fueran sus firmes y hermosos pechos.

•Tara- Cuéntame, ¿Porqué estás aquí? Aquí dice que eras un militar.
•Daril- Si, lo era. Estoy aquí porque dicen que tengo trastorno de identidad o algo así.
•Tara- ¿Y tu no lo crees?
•Daril- No sabría que decirte, ya que nunca me he dado cuenta de que cambio. Según ellos los que tenemos éste tarstorno no nos damos cuenta.
• Tara- ¿Y porqué no estás en un hospital psiquiátrico?
•Daril- No estoy loco. Me tómo mis medicamentos, estoy seguro de que eso es suficiente.
•Tara- ¿Como puedes estar seguro de algo que no vez? Hemos hecho muchos estudios a muchos pacientes, si me permites hacertelos a ti te puedo mostrar los cambios.
•Daril- Claro, mientras me puedas mostrar mis problemas, acepto.
•Tara- ¡Oh! Verte me pone tan caliente- me dijo mordiendose el labio inferior.
•Daril- ¿Estás bien?
•Tara- Si ¿Porque? Bueno pues la prueba se hará en ésta semana o la otra.
•Daril- ¡Perfecto!

Ese cambio de profesional a coqueta me sorprendió mucho. De pronto sonó el cronómetro. Se acabó la sección

•Daril- Entonces la veo mañana.
•Tara- Claro bombón, hoy o mañana, o cuando quieras, a la hora que sea.- me dijo deslizando su mano desde su cuello hasta sus senos.

Eso me dejó paralizado y con ganas de que esas manos fueran mías. De pronto, se para y se acerca a mi y me besa la mejilla, eso si me dejó babiando.

•Tara- Adiós, mañana te espero.
•Daril- A...diós..- dije algo tartamudo.

Salí de la oficina algo confundido y ahí estába Carl.

•Carl- ¿Cómo estuvo?
•Daril- Mejor de lo que esperaba y de lo que te puedas imaginar.

Entró a la oficina muy emocionado y me hizo un gesto de que lo esperara afuera.
Así que lo esperé hasta que por fin salió.

•Daril- ¿Y que tal?
•Carl- Bonita y sexy pero, muy amargada y seria.