Nuestro Camino: Creciendo Juntos [Parte 2]

El Numero 12 de Grimmauld Place

Draco: no entiendo ¿por qué tienes que irte tan pronto? -Draco está sentado en su cama viéndome mientras empaco todas mi cosas.

T/n: ya te lo dije mi madre me ordenó que regrese a casa por un tema personal. -respondí mientras tomaba algunas prendas que tenía dentro del armario de mi novio.

Draco: se suponía que celebraremos tu cumpleaños juntos -dijo mientras se ponía de pie e iba al ventana.

Me había olvidado completamente de eso. Draco me había dicho que tenía todo el día planeado para el día de mi cumpleaños, algo así como un día entero en la playa. Este sería el primer cumpleaños que estaríamos solos, ya que para el cumpleaños de él simplemente le organice una pequeña cena en la torre Astronómica.

Me acerque a él dejando mi maleta a medio hacer y cuando por fin lo tuve enfrente mio apoye mi rostro sobre su hombro -haciendo un poco de esfuerzo para llegar a este- y pude oler perfectamente su perfume Francés tan fresco.

T/n: perdóname pero tengo que ir, no puedo quedarme me necesitan-

Draco: ¿quiénes? -dijo dándose vuelta mirándome fijamente a los ojos.

Se suponía que él no tenía que saber nada.

T/n: no tendrías que saber pero...

Draco: ¿Qué ocurre?

T/n: prométeme que no le dirás nada a nadie, por favor- Draco asiente con un movimiento de cabeza- me iré con Sirius -los ojos de Draco se abrieron como platos- él me habló, me necesita para que le de información de mi padre y todo lo que se de el y de mi madre.

Draco: pero ni siquiera sabes nada de tu madre desde que estás aquí.

T/n: pero viví con ella quince años de mi vida y he escuchado cosas. Escucha, Draco, tú sabes que no soy igual a mi padre y nunca sería como él, ni siquiera me interesa llevar una marca en mi brazo izquierdo así que... esto es lo que tengo que hacer.

Draco: es muy arriesgado, T/n.

T/n: lo se, estoy arriesgando mucho al hacer esto pero ¿qué más puedo hacer? se quiénes son mis padres y si tengo que pelear contra ellos... estoy dispuesta a hacerlo.

Draco: eso es lo que me gusta de ti, tu valentía que tus padres podrían ver como rebeldía. Tienes mi completo apoyo y silencio.

Rodee a Draco con un tierno abrazo para que después el junte sus labios contra los míos. Continúe armando mi maleta y antes del mediodía me encontraba en la puerta principal de la Mansión esperando un auto de la década de los 50' -que en realidad es el auto de mi familia contratado por mi madre, basta con hacer un mini hechizo indetectable alzando mi varita en el lugar donde me encuentro- Cuando finalmente llegó, el chofer que estaba abordo acomodo mi equipaje mientras yo me despedía de Draco y sus padres.

Con un ligero apretón de manos me despedí de Lucius, Narcissa por su parte me dio un tierno abrazo y Draco -no muy feliz que digamos- me dio un beso muy tierno y pasional en los labios.

Draco: Te escribiré todos los días.

T/n: Nos vemos en Hogwarts -me despedí de él.

Draco: cuídate.

Finalmente estamos rumbo a Londres.

-Señorita, su madre sabe que vuelve a casa? -preguntó el chofer con una voz un tanto aguda.

T/n: no iremos a casa, llévame a el Municipio de Islington, Londres.

-¿Quiere que la lleve a algún lugar en particular?

T/n: no, solo llévame ahí y después se larga.

El viaje fue muy rápido. El auto pasaba por entremedio de los vehículos muggles a una velocidad asombrosa -pero claro, ningún muggle nos puede llegar a ver- finalmente llegamos.

Camine unas calles de un vecindario Muggle hasta llegar al número 12 de Grimmauld Place. Este edificio solo es visible para los magos y brujas. Un conjunto de escalones delanteros desgastados dan lugar a una puerta muy maltratada, toco el timbre del hogar esperando respuesta.

-¿T/n? -una voz masculina se escuchó tras la puerta.

T/n: soy yo, Sirius.

La puerta se abrió y dio lugar a un largo pasillo, iluminado con lámparas de gas y una gran araña de techo. Se escuchaban los gritos de una bruja anciana por lo lejos <<"¡Traidores a la sangre! ¡Sangre sucia! y ¡Hombres Lobos! gente totalmente detestable">> La puerta a mi espalda se cerró y camine directo al salón principal donde estaba la Familia Weasley, Hermione con su gato Crookshanks, el antiguo profesor de DCAO Remus Lupin, una bruja de pelo rosa chicloso bastante bonita y mi querido tío y prófugo Sirius Black.

-Silencio vieja andrajosa -gritaba, dirigiéndose a la voz de la anciana- es tu abuela Walburga -dijo con una sonrisa- bienvenida, sobrina.