My place is with you

Capítulo 18

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Jewel.

Todo paso muy rápido, fue como ver una película en cámara rápida donde el único que no se movía era yo. No sé exactamente qué sentir, es la primera vez que no tengo ni las más mínima idea de que hacer, mi mente está en blanco.

— jewel, siéntate, llevas parado ahí desde hace media hora — fiorella dijo mientras me tomaba por los hombros y me sentaba en la silla.

Voltee a ver a mi lado pero teo no estaba, él en verdad se había ido.

— ¿lo sabías? — dije por fin mirando directamente a fiorella.

— ¿saber qué? — frunció el ceño.

— ¿sabías desde un principio que era yo el siguiente?, después de todo tu fuiste la que me llamó para enseñarme el libro —

— fue una corazonada, no lo sabía a ciencia cierta. Te he visto desde que naciste, no se como funciona esto del destino pero fui vecina de tu madre, vi toda tu infancia, veía los pleitos, vi todo. —

A este punto ya no me sorprendía, solo pude reirme sardónicamente. De verdad que el destino era una porquería, una porquería muy bien planeada.

— deje de verte el día que ocurrió el accidente, de ahí no te vi hasta que pasaste por la tienda y entonces lo supe. Vi en tu cara esa chispa inigualable que te llenaba de asombro y felicidad, estabas buscando algo con desesperación, así que fue fácil suponerlo —

— ese fue el mejor día mi vida, la vez que conocí a teo. Esto no lo sabe nadie, pero aquel día había salido sin esperanzas, ese día estaba dispuesto a quitarme la vida, fue ahí cuando toque fondo. — acepte con melancolía — quiero mucho a mis padres, pero algo no me dejaba ser feliz, estaba perdido, no quería ser una molestia para nadie más. Y de repente llegó teo, así de la nada —

Nunca voy a olvidar ese sentimiento, como mi corazón se paro por ver a un pequeño niño asustado, jamás olvidare como casi me quedo sin aire al ver sus ojos grandes de color miel, como todos los vellos de mi cuerpo se erizaron al escuchar su voz. Ese día mori y renaci, fue el alba de lo que creía sería mi obscuridad eterna.

— lo sé, se lo que es estar perdido y que en ese momento llegue alguien a poner tu mundo de cabeza —

— sabes, aunque quisiera estar enojado con quien sea que esta allá arriba no puedo, porque sea como sean las cosas estoy agradecido de poder haber conocido a teo. Con él por primera vez en mucho tiempo encontré las ganas de volver a amar, por él quize ser una mejor persona. Y ahora se fue, ahora no se sí me perdone. — admití.

— el tambien dijo cosas hirientes, ¿no estás enojado? — hizo una mueca.

— claro que no, no dijo nada que no fuera verdad, el tiene razón al decir que no le conté las cosas, pero no fue porque no confiara en él, fue porque yo no quería que me viera débil, quería ser su héroe, tenía miedo de desepcionarlo. No lo deje ir porque me hubiera enojado, fue porque vi que en verdad tenía que irse. Sin embargo ahora no se sí quiera volver a verme — el pensarlo me llenaba de miedo, no quería que las cosas terminarán así.

Se muy bien que fue mucha información para él pues también lo fue para mí, se que las decisiones que tenemos que tomar no son fáciles, y que al igual que yo no quiero que él lo abandone todo, él no quiere que yo lo aga, se que fue la bomba que deje que explotara.