Capitulo Diecinueve

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Solo tenían que aguantar un par de días y podrían volver a sus vidas por separado.


El par de jóvenes llegaron a la ciudad Hei a los límites de la región de Lanling, ahí esperarían por noticias.

—Mis pies están matándome—se quejó Jin Ling finalmente, venia aguantándose hace un par de horas, pero era Lan SiZhui y estaban solos no es como que alguien lo fuera a criticar.

—En poco llegaremos a una posada y podrás descansar. —lo consoló Lan SiZhui girando para sonreírle.

Jin Ling estando a sus espaldas se preguntó seriamente como podía estar tan malditamente tranquilo.

—A-Ling, mira. —Jin Ling estuvo por ordenarle que no lo volviera a llamar así, pero al ver a Lan SiZhui tan preocupado se acercó a mirar.


En la pared había un letrero con un retrato de Jin Ling pidiendo una recompensa a quien lo encontrara, primero estaba sorprendido por la rapidez con la que la noticia se había difundido, pero luego pasó a estar molesto ya que la recompensa era una tontería.

—¿diez mil piezas de oro? ¡SOLO DIEZ MIL PIEZAS...! —Lan SiZhui le cubrió la boca con la mano antes de que llamara más la atención.


—Cálmate si no quieres que te encuentres más rapido. —Jin Ling aun furioso se lo quitó de encima.

—Eso solo valen mis túnicas más sencillas, al menos un millón de piezas de oro lo consideraría. —siguió quejándose indignado, Lan SiZhui se mordió los labios para aguantar la risa y prosiguió a avanzar a un callejón apartado con la joven amante.


Obviamente ya no contaban con el hecho de ser unos desconocidos por lo que Jin Ling tuvo que disfrazarse mejor para poder pasar a una posada.

—Podría preparar una habitación, por favor.

—¿Una habitación? No voy a dormir contigo. —se quejó Jin Ling en cuanto el hombre los dejó solos en su habitación.

—No tengo mucho dinero para ambos, puedes quedarte con la cama si gustas. —le respondió Lan Yuan con un tono suave mientras se apartaba hasta la mesa, él se quedaría ahí.


Jin Ling se ofendió por eso, ¿Cómo podía despreciarlo de ese modo? Era verdad que no planeaba compartir nada con, él, ni que esperaba que se arreglaran, pero, pero ¿Por qué Lan SiZhui parecía más indiferente en todo el asunto?

—Traerán la cena en un rato, así que puedes relajarte. —Con eso Lan SiZhui se sentó recargando ambos brazos en la mesa y recostando su cabeza para descansar.

También estaba agotado y aun así le había dejado la cama de la habitación.


Pero dejando eso de lado, Lan SiZhui recostándose sobre una mesa, dejando su mochila botada sin siquiera disculparse antes de quedarse dormido. No había pasado mucho tiempo y en serio se veía cambiado.

Como se lo había dicho, la cena llegó, pero no para ambos, los platillos solo eran para él, Jin Ling pensó en comer la mitad y dejarle el resto para cuando se despertara, pero ciertamente lo veía como una falta de respeto.


Curioso por toda la situación se estiró por la bolsa de viaje del joven Lan y efectivamente, apenas y le quedaba suficiente para no morirse de hambre, quizás si no hubiera dicho que estaba cansado y hambriento Lan SiZhui aún podría contar con ese fondo de emergencias.

MDZS ¿Es verdad o es una broma?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora