Sueño de amor.

Hola.

Espero que esta historia cortita les guste, y la disfruten.

Gracias por leerla.

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Taemin sonreía tan cautivadoramente mientras sus manos se deslizaban por las manos de Min Ho hasta llegar a sus dedos, entrelazándolos, delineando con la punta de su nariz la barbilla de Choi, haciéndolo suspirar.

—Te amo —escuchó un susurro en su oído.

—Taemin...

Sintió como besos eran dejados por toda su mejilla hasta sus labios, que besó lentamente y su cuerpo pareció saber cómo acomodarse entre sus piernas sin dejar mucho espacio entre ellos, y sus manos ya no estuvieron entrelazadas porque las suyas fueron a su espalda mientras podía sentir las de su novio subir hasta su cuello.

—Te amo, te amo, te amo —repitió Taemin entre cada beso.

Taemin había llegado a su vida de manera inesperada y tan cliché, porque lo había conocido como el amigo del novio de un amigo suyo que estuvo en una de sus reuniones cuando decidieron ir a beber después de clases. El chico al principio fue un poco callado, pero cuando hubo un poco más de confianza, habían intercambiado números con todos.

Min Ho nunca olvidaría cuando recibió un mensaje de Taemin invitándolo al cine, le pareció extraño, pero no molesto y antes de darse cuenta había estado diciendo que sí. Lee había tenido las entradas ya compradas cuando él llegó, y no podía negar que disfrutó tanto de la película, que cuando salieron del cine no podía dejar de hablar de ella, viendo a su acompañante sonreír mientras lo escuchaba.

Tampoco creía que olvidaría cuando Taemin lo tomó de su abrigo, susurrando su nombre, y al girarse tuvo los labios del chico sobre los suyos, en un beso casto que lo sorprendió. Fue algo tan corto que apenas pudo procesarlo, teniendo que ver una sonrisa traviesa luego de eso.

—Me gustas.

Esa simple frase fue con la que Taemin dio inicio a todo, al tenerlo a su alrededor, a sentir sus labios cada vez que tuvieron la oportunidad y se descubrió pensando en el chico gran parte del día, pidiéndole que fuera su novio y siendo aceptado mientras su rostro fue llenado de besos.

Ser novio de Taemin era como un sueño y Min Ho nunca pensó que tendría algo así, ni que se sentiría de esa manera por una persona, porque antes de darse cuenta su vida estaba girando alrededor de su novio, de esos besos que recibía en los pasillos sin importarle ser visto, y de sus manos traviesas cuando nadie los veía.

Sin darse cuenta en menos de seis meses su vida estaba girando alrededor de Taemin, de sus manos acariciándolo, de sus besos, de las palabras de amor que le eran susurradas cuando nadie los veía, cuando hacían el amor hasta la madrugada. Min Ho que hasta el momento no se había planteado una relación tan seria como para pensar en el matrimonio, comenzaba a hacerlo.

Min Ho nunca le iba a decir a Taemin que su comida sabía horrible y que pedir pizza era su opción más viable si no quería morir intoxicado, porque no sabía cómo lo había hecho su novio, pero unas simples tostadas habían terminado convirtiéndose en carbón puro.

Realmente fueron seis meses en los que Min Ho sentía que estaba en el paraíso, incluso empezó a ver anillos con los que posiblemente podría proponerle matrimonio a su novio, sin embargo, antes de que se diera cuento, ese paraíso se había derrumbado, porque de la misma manera en que Taemin llegó a su vida, se fue.

—Lo siento —había dicho Taemin mirándolo a los ojos.

—Taem...

—No te aferres a mí, no llores —su mano limpió sus lágrimas —no lo merezco. Cuídate y no me odies por favor.

Taemin se acercó y unió sus labios por última vez antes de girarse y salir del apartamento de Min Ho.

Nunca olvidaría esa imagen, la espalda de Taemin alejándose, dejándolo con el corazón roto luego de lo que él creyó una historia de amor perfecta, la cual sólo duró seis meses.