Volkacio | One-Shots

Me gustas, ¿te gusto?

Ambos salían del antiguo despacho, después de recordar aquel suceso.

Pero Horacio seguía sintiendo lo mismo después de 11 largos años, así que se preparó mental y emocionalmente para lo que iba a hacer, ya que después de todo sabía cual sería la respuesta.

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—Volkov—

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—Si— Volkov notó algo nervioso a Horacio pero no sabía el porqué, pensó que podía ser por haber recordado ese momento, pero no esperaba lo que iba a decir.

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—Me- ¡Me gustas! ¿te gusto?— Lo último lo dijo en un audible susurro, ya que sabía que la respuesta sería un rechazo.

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—Ehh— Se quedó en shock, no sabía que contestar, pero tampoco quería decir una estupidez. Hace 11 años negaba sus sentimientos, ahora los había aceptado, pero nunca sabía que contestar.

Debido al silencio y a la tensión que había en la abandonada entrada, Horacio había interpretado que la respuesta fue un rechazo, cosa que no era cierta.

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—Eh, yo- —Horacio le interrumpió.

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—No hace falta que contestes, ya se la respuesta... — Dijo lo último en un tono ciertamente triste, aunque se puso la máscara y las enormes gafas antes de que se le callera alguna lágrima.

Volkov se había quedado estático, una presión había aparecido en su pecho al escuchar es triste tono en la voz de Horacio, ahora se sentía culpable de haber provocado esa sensación en la persona que realmente quería.

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—Vienes o qué— Había hablado Horacio, con la intención de que viera lo que le hicieron a lugar para subir las escaleras.

[...]

El resto del fue normal, pero ninguno se podía quitar el tema de la cabeza, mientras que Horacio no se quitaba el pensamiento de que Volkov no lo amaría nunca, Volkov pensaba en que Horacio se estaría sintiendo mal por su culpa.

Cuando llegaron a casa a las 22:35h, Horacio simplemente le dijo a Viktor que tenía que hacer unas cosas y él se fue nuevamente. Volkov pensó que eran cosas del FBI, pero lo que no sabía es que, Horacio, había ido a comprar cerveza...

Volkov entró a la casa y buscó una de las muchas botella de Vodka que trajo de Rusia, pará después soltarla en el mismo sitio de donde la cogió, se negaba a emborracharse otra vez, se prometió a sí mismo que pararía.

Subió a su habitación, viendo aquel inquietante cuadro que le había probocado insomnio las últimas 2 noches. Decidió quedarse únicamente en el salón viendo la televisión hasta dormirse[...] Eran las 23:54h, y Volkov se despertó del sofá al escuchar ruidos de botellas de cristal chocar. La televisión se apagó automáticamente, por lo que no había ningúna luz, únicamente la que entraba por las ventanas.

Volkov se levantó cuidadosamente y se dirigió hacia la cocina lentamente, encendió la luz y no asimilaba lo que veía...

En la cocina se encontraba Horacio sentado bastante borracho, con el rimel corrido, se notaba que había llorado, cuando Volkov encendió la luz, Horacio tenía una de las botella de vodka que trajo Volkov en la mano medio vacía, mientras que alrededor suyo había una 10 botella de cerveza vacía.

Volkov al verlo, rápidamente se acercó a él y le quitó la botella de las manos, dejándola a un lado y cogiendo a Horacio en brazos para ir al baño.

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—Pe-¡Pero, Horacio! ¿Por qué? Venga vamos al baño—

Horacio miró hacia arriba, encontrándose a un Volkov con una cara de preocupación, que por el efecto del alcohol pensó que estaba enfadado por lo que empezó a llorar otra vez.