𝗠𝗘 𝗔𝗡𝗗 𝗨 | 𝗡𝗔𝗛𝗢𝗬𝗔 𝗞𝗔𝗪𝗔𝗧𝗔

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Las escandalosas risas llenas de emoción inundaban mis oídos convirtiéndolo en una adrenalina. La calle estaba apenas iluminada por unas cuantas luces indicando que todo el vecindario estaba dormido, incluso si alguien se llegara a quejar volvería a hacer el gran escándalo que estábamos haciendo solo para vivir ese momento una vez más. Mis piernas tenían la única finalidad de correr con más intensidad sin importar que el viento tan frío se infiltrara por debajo de mi falda. Nuestro inmenso amor era libre como una flor volando en el viento.

Mis manos se sujetaban fuertemente de la tuya cuando el cansancio apareció. Me comenzabas a arrastrar mientras mis ojos se perdían en tu irradiante sonrisa, ya estaba acostumbrada a verla casi todos los días. Sin embargo, hoy era diferente, estaba siendo tan llamativa como una gran bola de fuego en medio de una tormenta de nieve. No estábamos siendo consientes de las consecuencias.

Las miradas furiosas de mis padres y las amenazas en gritos que provenían de mi casa los dejamos muy atrás, disfrute la impotencia y la vergüenza que ellos sintieron como autoridad ante lo que estaba pasando. Mandé al carajo todo para vivir lo que mi adolescencia me había prometido. Desde ese momento me volví más valiente y todo fue gracias a ti.

Mis pulmones pudieron descansar en paz una vez llegamos a ese MiniMarket, haber corrido unas cuantas calles me dejó agotada. Entramos al lugar con nuestras respiraciones agitadas y con extremas ganas de explorar el lugar. Comíamos una sopa instantánea para ambos; sentados en la banqueta con un letrero de "24 horas" iluminando nuestra vista. Con pequeñas risas y miradas graciosas, jugábamos con los fideos pretendiendo que era nuestro cabello o que simplemente nuestros bigotes habían crecido. Manche tu lindo rostro con la sopa, me miraste muy indignado, mis burlas te hicieron tomar venganza y me hiciste los mismo. A pesar de que eran las 2:00 de la mañana nuestros ojos no daban ningún indicio de cansancio. Nuestras risas no podían cesar incluso en ese momento, si dejábamos de hacerlo nunca más podríamos intentarlo.

- Vamos, daremos una vuelta -

Me diste tu abrigo y aún con sonrisas cómplices buscamos tu motocicleta, la tuviste que dejar en medio de la calle, el ruido del motor hubiera despertado a mis padres unos minutos antes de que nos atraparan en media huida. Mi mentón estaba descansando sobre tu hombro y pude notar tu expresión tan concentrada en el acto del viento chocar fuertemente contra mis mejillas sonrojadas. El casco evitaba a toda costa que mi cabello pudiera ser acariciado por la briza y la sensación nada desagradable de la baja temperatura. Mis brazos abrazaban fuertemente tu cintura, acaricias te delicadamente mis dedos; mi cuerpo en una respuesta desencadenó una corriente eléctrica que viajó por todo mi cuerpo y tocó cada rincón, se aseguro de que el recuerdo se haya guardado en mi mente.

Cuando dijiste que conducirías durante todo la noche hasta llegar al fin del mundo, para estar aferrada a ti y sentir el tacto tan dulce y delicado, esperaba que lo dijeras de verdad. Ilusionaste a mi corazón de una manera tan peligrosa que mi vista se quedó borrosa.

- Mañana hagamos esto de nuevo, mejor hagámoslo siempre -

Ambos reíamos como locos y las luces de la ciudad se convirtieron en testigos. Si se pudiera repetir este tipo de bellos momentos, lo haría sin pensar, solo para ver tu expresión tan boba diciendo que tú tampoco terminabas de creer que todo esto estaba sucediendo.

Te daría todo lo que estuviera y no a mí alcance para llenarte de satisfacción. Solo yo sabía todo lo que tu corazón había sufrido, y de los intentos desesperados por hacer desaparecer el dolor. Ahora eras feliz. ¿Podrías mantenerte así incluso si mañana muero? No quería imaginar como te sentirías en esos momentos. Quería preguntar porqué me amabas de la manera en la que lo hacías. Mi autoestima no era buena para tener razones suficientes. ¿Era solo porque nos hacíamos bien estando juntos?

Nuestras pisadas eran cuidadosas, lo último que queríamos era que tus padres se despertaran a esas horas de la noche. Y aunque solo nos darían un pequeño regaño nunca se hubieran molestado de tenerme ahí. No sabía porqué tu madre siempre me agradecía por mi existencia en tu vida. Tu hermano menor se hubiera burlado de lo que hicimos y diría que habíamos perdido la cabeza.

Tu mano me ayudó a terminar de subir cuidadosamente el techo. Sentía que ya nada nos podía salir mal después de esa noche, incluso no pensé un poco en el futuro; me distrajeron tus manos acariciando mi mejilla mientras comparabas repetidas veces mi belleza con la de las estrellas que adornaban la noche. 

El calor que producían nuestras cuerpos juntos hacía sentir al frío envidioso de la calidez que dos humanos podían tener.

- Ya he dicho que te amo ¿Qué más quieres de mí? -

- Quiero que lo digas otra vez, por favor. -

Mi cuerpo siendo envuelto por el tuyo me pedían a gritos que me recordaras lo que sentías por mí pero por culpa de la vergüenza no podía escuchar. La luz de la luna me ayudaba a ver tus mejillas sonrojadas. Podíamos jugar toda la noche para ver quién podía amar más. Sin importar que al final siempre te terminabas poniendo nervioso como en ese momento, amaba que de tus finos labios saliera la misma frase de siempre.

- Te amo -

Mi mejilla era acariciada débilmente por una lagrima al recordarlo. Solo me quedaban bellos recuerdos que  prometí guardarlos en el fondo de mi corazón. 

Ese día las palabras no fueron suficientes para decir lo mucho que te amaba, quería explicar lo especial que me hacías sentir. 

Mi cuerpo dejó de reaccionar a las caricias que dejaban tus manos. Mi lagrima ya se encontraba seca en mi rostro. Se hacía muy tarde y mi cuerpo avanzaba en dirección a una fuerte luz. 

Otra lagrima apareció.

Ahora yo era la única corriendo hacia el fin del mundo.

𖧧

Este Os tiene la finalidad de que pasen un bonito momento imaginando una noche con mi algodón de azúcar. Quise intentar un final discretamente triste, ya que de ahí surge el recuerdo de felicidad que tuvo nuestra rayis. Gracias por tomarse el tiempo de leer.

Tengo más ideas pero ahora ya no van a ser One-Shots muack.

𝘀. 𓂃