One Shots (Draco Malfoy)

i. celos

si tienen algún pedido sobre un one shot en específico, pueden escribirlo aquí y se lo traduzco a la autora original <3

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Una genuina sonrisa adornó sus suaves facciones, mientras que el chico de ojos verdes contaba un chiste, haciéndola reír.

Isabella Morgan estaba en el pasillo principal con Harry Potter, hablando sobre todo y nada.

Conversando y riendo, sus ojos brillaron. El aroma de comida deliciosa siendo devorada por hambrientos estudiantes.

Sus ojos avellana encontraron al reloj justo detras de Potter. Sonrió para si misma, pero le lanzó a Harry una mirada de disculpa.

—Lo siento, Harry, pero tengo que irme—se encaminó y pasó su nolsa por arriba de su hombro.

—Por supuesto, te veo por ahí.

El chico castaño asintió antes de volver hacia su amigo Gryffindor.

El rubio Slytherin apretó su mandíbula mientras miraba a Bella hablándole a él. A él de toda la gente. Así que abandonó el pasillo principal.

A pesar de ser una Hufflepuff, Bella era amiga con todas las casas, se llevaba con todos los estudiantes.

Para la mayoría, les tomó por sorpresa, pero la dulce chica salía con el príncipe de Slytherin: Draco Malfoy.

Isabella era el tipo de persona que ponía a todos sobre ella. Su voz,siempre dulce y gentil.

Completamente lo opuesto a Malfoy.

Sus piernas la llevaron dentro de la Sala Común de Slytherin, donde unos cuantos estudiantes conversaban.

Su castaño cabello caía caía sobre su espalda, sus rizos apenas rebotando mientras se encaminaba a los dormitorios de los chicos. A la habitación de su novio.

Sus nudillos chocaron contra la puerta de madera, alertando al rubio que ella estaba allí. Él no respondió , así que decidió solo entrar. Cerró la puerta tras ella silenciosa.

Allí estaba él. Sentado en su cama, sus ojos quemando a la chica que recién había llegado a su habitación.

El aire se atascó en su garganta ante la presencia de él.

Vestía su infame traje negro. Bella hizo como si ni siquiera notase cuan bien se venía.

—Hola, amor—la chica caminó hacia el rubio, tratando de darle un beso, pero antes de que pudiera él se paró. Casi la derriba. Su cuerpo era mucho más grande que el de ella.

—¿Por qué diablos hablabas con Potter?—su voz irradiaba con veneno, la imagen del chico morena poniendo su mano en su muslo de novia. Isabella rodó los ojos, la mayoría de sus discusiones solían ser sobre sus amigos.

—Es mi amigo, eso es todo—esbozó una dulce sonrisa. A Bella no le gustaba pelear con él ni con nadie. Siempre intentaba encontrar soluciones.

Los helados ojos azules de Malfoy viajaron sobre su pequeña pero curvilínea silueta.

—No te creo.

Esas palabras enfadaron a Bella, apretó la mandíbula, tratando de contener lo mucho que quería gritarle.

—Eres un idiota—espetó, pero no lo lamentó ni un poco. Él se lo merecía. Intentó hacer las cosas bien y no dejar que esta simple situación se convierta en algo más grande. Pero él nunca escuchaba.

—Y tu una puta—estaba burlándose, sabía donde estaba su nervio. La chica rara vez se enojaba, siempre era agradable.

Los ojos de Bella se ensancharon ante sus repentinas palabras. Levantó la mano y la arrastró hacia la mejilla del rubio en un golpe seco, su cabeza giró en la dirección opuesta.