𝙾𝙽𝙴𝚂𝙷𝙾𝚃𝚂 //𝙴𝚁𝙴𝙽 𝚇 𝙾𝙲

𝚍𝚎𝚋𝚒𝚕 +16

-No pueden tratar a la gente como basura, malditos animales. - gritó a un oficial.

- ¿Que dices? - me toma de la camisa, su horrible cara vieja y apestosa hace que mire a otro lado. -No te golpeare porque eres una preciosidad. - el me suelta haciendo que caiga.

-No deberías hacer esas estupideces, te matarían ahora si quisieran. - un hombre con banda roja me ayuda.

-Debo ir a hacer un trabajo de verdad, no matar a mi propia gente, idiotas. - quito su mano de la mía, mostrándole mi dedo del medio.

-Señorita, podría ayudarme, por favor. - un niño me suplica, el sostiene a un lisiado

-Por supuesto. - ayudo al inválido con el hombro apoyándolo a mí.

Ambos con fuerza logramos meterlo a una habitación donde podré ver sus heridas.

-Gracias por ayudarlo. - sonrío al pequeño. -Puedes irte, yo lo cuidaré. - me fijo en la banda que lleva, es un niño pequeño, mi corazón se quiebra pensando que él fue a la guerra solo por maldecirse a sí mismo, para tener un titán.

-Gracias, aunque me gustaría visitarlo. - dice el rubio.

-Gracias. - susurra el hombre.

Ambos lo miramos, es normal que mucha gente venga traumatizada del campo de guerra, así que no dicen mucho.

-No hay de que, debo irme, iré a ver a mi familia. - sonríe dejándonos solos.

-Disculpe, ¿podría ver su pierna y su vendaje en el rostro? - trato de ser amable.

-No.- el responde cortante.

-Es por su bien, descuide seré lo más amable posible. - he tratado con gente muy obstinada.

-No.- no tengo muchas ganas de tolerar a la gente hoy.

-Como quiera, pero si la herida llegase a infectar, podría morir. - tomo mi libreta para anotar algunas cosas. - ¿Nombre? ¿Apellido? - no contesta.

-No lo recuerdo. -

-Ahora que recuerdo usted estaba en la fila de gente la cual no saben qué hacer con ellos, eso tiene sentido. - digo en voz alta. -Me gustaría ayudarlo, lo llevarán a un hospital psiquiátrico, pero puedo primero revisarlo, quizá decirle a la gente de ahí que lo conozco, si usted entra ahí, nunca más saldrá. - le digo.

- ¿Por qué haría eso? - voltea a mirarme con una curiosa mirada, no sabría cómo describir eso.

-No me malinterprete, solo trato de que este sea un mundo menos horrible, aunque no es mucho. - susurro.

-Entonces solo eres una buena persona. - contesta.

-No, no creo serlo. - sonrío por eso.

-No debería aprovecharme de su bondad. - sonríe ladinamente para sí mismo.

-Jajá no se equivoqué, no lo mantendría, podría ayudarle. - quizá piense que me encargaría de él.

-No gracias, no quiero su ayuda. - se levanta con la muleta.

- ¿Puedo ayudarlo hasta que llegue a su fila? - el levanta su ceja algo confundido.

—•ꕤ•—

- ¿Señor Kruger? - bajo por las escaleras de ese extraño sótano.

-Estoy aquí abajo t/n.- veo una sombra algo diferente a la del hombre que había conocido, ocasionando un escalofrío en mi espalda, no sabía que me hacía pensar eso.