Gwen La costurera sagrada

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Luzio: - suelta un suspiro – bien llegamos hasta la ciudad de Ixtal – mira a Gwen – solo intentemos no llamar la atención tanto les parece?

Morgana: je, creo que con este carruaje es algo casi imposible, pero bueno...

Gwen: tiene razón Morgana, es un bueno algo muy de llamar la atención pero bueno...

Luzio: - algo apenado – jeje, ya veo bueno, iremos a ver esa tal Madre árbol, que nos mencionó la chica esa, luego veremos que nos comenta

Gwen: claro jeje (espero... espero y recordar algo de mi pasado)

Luzio siguió guiando el carruaje, pasaban entre las personas, estas los miraban con curiosidad, pero estos no le tomaban importancia, llegaron hasta lo que parecía ser otra entrada más grande, y uno de los guardias se acercó a ellos

Guardia 1: oh, ustedes son de Demacia verdad, adelanten pueden pasar

Luzio: - algo nervioso – eh... gracias jeje (no somos de Demacia pero si podemos entrar)

Los cuatro entraron hasta lo que parecía ser una capital más elegante, todos vestían ropas un poco mas diferentes, pero nada fuera de lo normal

Gwen: wow, aquí adentro tiene diferente estilo al de afuera...

Luzio: eh... si bueno aquí se podría decir que es como Piltover viven los que pueden darse ese lujo, y afuera los que sobreviven y trabajan para ellos

Gwen: ya veo, talvez todas las regiones sean diferentes, pero a veces son tan iguales

Luzio: je, tiene razón – apuntando a una puerta llamativa – esa puerta es para entrar al palacio de Ixtal, asi como en Demacia pero aquí se dirigen diferentes leyes

Gwen: entonces aquí los magos si pueden vivir tranquilamente?

Luzio: je, aquí la magia es bastante común, más de lo que parece, pero eso no quita que sea un lugar perfecto, tiene algunas cosas que no debería tener, bueno todas las regiones tiene algunas leyes que bueno – mira con nerviosismo a Gwen – no son muy buenas

Gwen: mmm entiendo – sonríe dulcemente – entonces solo veré las cosas buenas

Luzio: está bien jeje, solo sonríe te parece – sonríe –

Los cuatro llegaron hasta el gran palacio de Ixtal se bajaron del carruaje y alguien les abrió las puertas, Luzio era el más nervioso ya que no sabía que iba a mencionar, de repente una mujer de una edad avanzada los recibió tenía una corona dorada

¿?: mucho gusto aventureros, ustedes son de Demacia cierto

Los cuatro asintieron, y la mujer se presentó como la Reyna de Ixtal, Luzio se arrodillo en señal de respeto, pero fue el único que lo hizo, Morgana no creía que se lo merecía, Gwen no sabía porque Luzio se había arrodillado y Annie bueno, estaba jugando con Tibbers

Reyna: je, no hace falta tanta formalidad, pero díganme que los trae aventureros a este lugar tan lejano – con un tono calmado –

Luzio: eh... la verdad majestad venimos en busca de información, información de alguien sabio... pero si le soy sincero no sabría quién sería ese sabio – todo lo menciono en un tono educado –

Reyna: ya veo, entonces buscan a la ma... - interrumpida –

Antes de que pudiera terminar la frase una pequeña explosión surgió de una de las habitación del palacio, todos se sorprendieron Annie se escondió detrás de Luzio con bastante temor, y este sentía como temblaba, se agacho a esta y le hablo calmadamente