Perdida en él | Primera Parte ❤

Capítulo 8

Narra Cristina:

Estaba perdida.

Colt me estaba presionando contra la pared y me miraba cara a cara con una expresión que resultaba un tanto amenazante, todavía más de lo que era su expresión natural, que acostumbraba a ser fría y misteriosa.

De repente este me volvió a agarrar de las muñecas y con un gesto ansioso señalo mis manos.

- Míralas bien _ hice caso y las mire asustada. Están manchadas por su sangre _ espetó mientras se me caía lentamente la cara de la vergüenza.

- N-no sé de que me hablas _ titubeé nerviosamente mientras mis ojos se cristalizaban.

Cristina, te acabas de delatar.

Mientras mi conciencia me jugaba una mala pasada de nuevo, no tuve una cosa mejor que hacer que dejar de retener mis lágrimas, que segundos más tarde empezaron a rodar por mis mejillas.

- Tú... _ me amenazó con sangre inyectada en los ojos. Lo mataste _ sentenció.

Cada palabra que él pronunciaba suponía una puñalada de culpabilidad que me dejaba cada vez más ensangrentada aún sabiendo que era inocente.

- Yo, jamás haría algo así _ dije en un intento fallido de parecer segura de mi misma. Pregúntale a Lorena, estábamos viendo una película con Manu _ el hecho de tan solo pronunciar el nombre de mi amigo me daba ganas de llorar.

- Ya..., por cierto _ una sonrisa picarona creció en su rostro. ¿Qué tal se encuentra Manu? _ me dijo burlonamente.

Hijo de puta..., lo sabía.

- ¡Eres un asqueroso hijo de tu madre! _ le grité sin piedad.

Este ante mi sorpresa empezó a reírse, era tan estúpido, tan bipolar, lo odiaba...

- Tú lo mataste, ¿Verdad? _ pregunté ya sabiendo la respuesta.

- No Cristina, _ comenzó. Fuiste tú _ dijo dejándome helada, ya que era verdad que era mi culpa, pero yo sabía que el desgraciado que le hizo eso a mi amigo era él y no yo.

En ese momento empecé a golpear su perfectamente esculpido abdomen pero esto pareció hacerle cosquillas, ya que me miro sonriente con una mirada de superioridad.

- Yo maté a tu amigo, yo maté a tu amigo _ repetía en tono cantarín.

- Te odio asqueroso hijo de puta _ lloraba retorciéndome en el suelo del aseo de la clase de biología.

Mis ojos parecían dos tomates, rojos y cansados de tanto llorar, mi voz estaba desgastada y me quería morir. El gilipollas de 1'85 metros me miraba divertido. No puedo creer que le diese igual la muerte de su hermano y de mi mejor amigo, era un despiadado psicópata.

- Eh relájate, volverá... a no, es verdad, está muerto _ dijo haciendo énfasis en esta última palabra para arrastrarme hacia la locura extrema.

Estaba tan harta que se me ocurrió jugar al mismo juego que él.

- Yo he perdido a un amigo, pero tu has perdido a un hermano _ le dije con toda la rabia del mundo concentrada en mis labios. Yo maté a tu hermano _ sentencié cruelmente.

Este no parecía inmutarse, se había quedado sonriendo, como si hubiese conseguido lo que quería. De repente, como por arte de magia sacó del bolsillo su teléfono, el último Iphone del mercado y para mi sorpresa, estaba grabando. El puto móvil de Colt había grabado la conversación entera, ya que este indicaba 5 minutos grabando. Estaba en blanco.

- Adiós encanto _ me dio un beso en la frente. 

- Puto bipolar _ pronuncié.

- Nos vemos en los juzgados asesina _ dijo haciéndome temblar.

Abrió la puerta y por si no fuera poca mi humillación añadió:

- Ah, por cierto, tienes la cara bastante colorada.

- Es por la rabia _ contesté.

- Sabes que no.

Y así me dejó cerrando la puerta bruscamente conmigo dentro del baño, colorada, humillada, estúpida y a punto de enfrentarme a una potente pena de cárcel, necesitaba hablar esto con Lorena para que me diese consejo, pero por ahora estaba destruida, acabada, rota...

Tengo miedo

Remató mi conciencia que adoraba hacerme sentir mal.

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Nota de autor:

Ahora van a empezar capítulos intensitos ... :)

Gracias por leer