Capítulo 1: El comienzo.

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Paula, María y Sofía son las mejores amigas que hay en el mundo y se conocieron de muy pequeñas.

Paula, nuestra protagonista principal, y María se conocieron en Parvulitos y tienen la misma edad. Y Sofía tiene dos años más que ellas, conoció a Paula a raíz de que sus madres eran compañeras de trabajo y buenas amigas. En las Navidades de 2002 la madre de Paula invitó a ambas madres con sus hijas para merendar e ir a dar un paseo con el alumbrado navideño encendido.

Aquella tarde mientras las madres congeniaban las hijas jugaban inocentemente y se lo pasaron de lo lindo.
Tras la merienda fueron al centro; entraron en algunas tiendas, hicieron compras, comentaban el alumbrado, ... Paula se bajó del carrito para acercarse al escaparate de una juguetería pero ninguna se dió cuenta hasta que llegaron a la Plaza de la Constitución; allí Carlota, la madre de Paula, se puso histérica al no ver a su hija y entonces Loli, la madre de María, la intentaba tranquilizar mientras Inés, la madre de Sofía, fue a contarles lo sucedido a una pareja de Policías que hacía su ronda diaria.
María se despertó con los llantos de la madre de Paula y vió a Sofía desaparecer entre la gente; y mientras tanto Paula al terminar de ver la juguetería empezó a llorar porqué no veía a las demás, quienes la acompañaban, y siguió andando hasta el Árbol de Navidad de la misma Plaza, en la cuál se encontraban su madre y las demás, y se metió dentro de él, triste y sin saber que hacer, tan sólo lloraba.
Sofía se subió en el escenario del otro lado de la Plaza e interrumpió un concierto que estaban dando y empezó a gritar el nombre de Paula pero tras un buen rato haciéndolo y que no diese resultado se bajó del escenario y buscó sola a pie por toda la Plaza y cuando se hartó se metió dentro del gran Árbol de luces. Allí a pesar de todo el jaleo del centro, que estaba lleno, escuchó un llanto, se dió la vuelta vió a Paula y la abrazó con las lágrimas saltadas.

Pasan dos horas, desde que desapareció Paula y tras ella Sofía, de tanta desesperación para las tres madres en especial para Carlota e Inés. Loli ve la escena de sus dos amigas llorando, la Policía apenas progresa en la búsqueda de las criaturas y entonces llama a su marido Juan, quién trabaja en la cárcel y puede mandar a más cuadrillas de policías para acelerar la situación. Los refuerzos no tardaron en llegar y un Policía de sexo femenino se le ocurrió mirar debajo del Escenario y después dentro del Árbol de luces consiguiendo finalmente encontrar a las inocentes pequeñajas. Las llevó junto a sus progenitoras, las cuales en cuanto las visualizarón por fin, las abrazaron fuertemente y Loli avisó de la aparición para que cediesen en la búsqueda, acto seguido las tres adultas le hicieron presente su agradecimiento a la mujer policía y las pequeñas se abrazaron también quedándose mudas durante un minuto hasta que Sofía rompió el silencio dirigiéndose con enfado a Paula: "No vuelvas a perderte o si no ... no volveremos a ser amigas.". Paula con tan solo 3 años y ver toda situación que había ocurrido por su capricho de bajarse del cochecito para ver un simple escaparate entendió lo que le dijo su amiga.
Al final se fueron a casa, cada dos por su camino, aunque Inés y su hija vieron a un Cartero Real sentado en un trono junto a un gran buzón, quién recibía a niños para coger las cartas a los Reyes Magos así que Sofía hizó una nueva carta y se pusieron en cola.


Su Carta fue ésta:

Queridos Reyes Magos:
Soy Sofía. Creo que me he portado bien este año menos hoy que me he escapado sin decírselo a mamá para buscar a Paula, y a lo mejor me traéis carbón entones voy a pedir dos cosas solo en vez de todos los juguetes que quiero: Por favor quiero que María, Paula y yo seamos amigas siempre y que no nos pase nada malo a ninguna. Prometo a partir de ahora ser buena el resto de mi vida, gracias.

Besos.

Sofía F.

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