Only You

(NO olvides comentar)

Mayo entre muchas cosas que amaba, tenía una favorita... De echo no era una cosa ni un animal, era un chico de apariencia atlética, peli castaño de ojos verdes que le alegraba el Corazón cada mañana.

- Víctor es tan... -  murmuró hipnotizado.

- especial... - escucho a su lado, y esto lo saco de su burbuja.

Mayo miro de reojo a su costado, estaba un chico de pelo gris y ojos verdes y amarillos también admirando como Víctor hablaba con Trollino algo alejado de ellos.

- ¿Acenix? -

- ¡Oh! ¡Hola Mayo! No te había visto, perdón - Acenix no quitaba su vista del frente y esto causó una curiosidad en Mayo ¿Estaba viendo también a Víctor?

- Tu... -

Acenix por fin le miró a la cara y con gesto de duda espero la pregunta de Mayo.

- ¿A ti también te gusta? - pronunció de la nada el semi gato.

- ¿Eh? ¿Qué? - mayo se puso rápidamente nervioso.

- Tu sabes a lo que me refiero... -

- Ah... No sé si te refieres a... -

- ¡Víctor! A ti también te gusta, ¿Verdad? - Acenix sonrió de lado.

"También"

Luego de eso Acenix se marchó con un aura de buenos animos, no parecía un desafío, no parecía una amenaza... Era algo muy "normal"

Los días pasaron y un día de lluvia tanto Mayo, Víctor y Acenix se habían quedado en casa.

- ¿Quieren algo de beber? - pregunto el único castaño, animadamente.

- ¡Un café no suena mal! - dijo animado Mayo - ¿y tú Acenix? -

- Yo... También quisiera un café - tranquilo menciono el peli gris.

- ¡perfecto! Ya vuelvo~ no me tardo -

Y el castaño desapareció camino a la cocina, dejando a Mayo y Acenix solos una vez más.

- Me gustan más sus ojos... - murmuró Acenix. - ¡Son geniales y hermosos! -

Mayo puso una cara de confusión pero al ver la expresión tranquila de Acenix tambien se calmó.

- Si... Aunque su cabello... Parece suave... -  murmuró sonrojándose.

- Y lo es... -

- ¿¡Alguna vez lo tocaste!? - Mayo con verdadera curiosidad se acercó al rostro de Acenix.

- ¡Claro! Cuando peleamos muchas veces le tomó del pelo para regañarlo - decía casi orgulloso.

- Oh... Qué envidia... A mí me da algo de pena... - murmuró Mayo.

- ¡Oh! Ya se... Ven - Acenix tomo de la mano a el de cabello negro y lo condujo a la cocina donde Invictor esperaba que el agua calentará.

-¡Víctor! - dijo y llamó la atención del castaño al ver como Acenix y Mayo estaban tomados de la mano.

- ¡Acenix basta! - grito Mayo desesperado.

Pero el semi gato no hizo caso y condujo la mano de Mayo al pelo de Víctor dejando a ambos confundidos.

- Oh... Sí que es suave - dijo sin pensar el de ojos morados al tocar el suave pelo de Víctor causando un sonrojó en el.

- ¡Te lo dije! - Acenix sonrió y también puso su mano en el cabello de Víctor, este solo podía observar mientras le despeinadan.