28. sιᴇɴᴅᴏ ᴜɴ ɢᴀɴᴀᴅᴏʀ

461 53 11
                                    




๛Jungkook se sentía sumamente fuera de lugar en aquella casa, prácticamente no podía levantarse de su asiento ya que eran atendidos como si fuesen personas postradas en el sofá.

Lo atendían con guantes de seda primeramente porque era visita, y segundo porque Taehyung había divulgado que su esposo había salido del hospital hace poco y estaba convaleciente.

Estaba temiendo que le entraran ganas de ir al baño, porque estaba más que seguro que eran capaces de cargarlo sobre sus hombros para llevarlo hasta el lugar y ofrecerse a limpiarle a culo si era necesario.

Recién al ver las interacciones de la familia de Taehyung, Jungkook había notado que durante toda su vida se había comportado como un hombre machista.

Y es que en la actualidad dividían las tareas de la casa, pero Jungkook no siempre había tenido esa disposición.

Al estar casado con su esposa el simplemente dejaba los quehaceres del hogar en sus manos, el sólo se sentaba a la mesa esperando para que le sirvan la comida, no lavaba ropa, mucho menos se ofrecía a retirar la mesa o lavar los platos.

Todo aquello en ese momento le había parecido algo normal y correcto, hasta verlo en primera fila en la casa de los padres de Taehyung.

Era inapropiado.

Muy inapropiado que hombres jóvenes y saludables, como el padre de Taehyung, sus tíos, primos e incluso el mismo Jungkook estuvieran esperando por su comida sentados en sus lugares en la mesa mientras la abuela de Taehyung, las mujeres e incluso el mismo Taehyung los atendían hasta para llevarles un vaso de agua en lugar de que los flojos de mierda se levantaran por su cuenta a buscarlo.

Jungkook era consciente de haber sido criado con ciertas comodidades, pero nada siquiera parecido a como era en casa de los padres de Taehyung.

Su hijo mayor parecía sumamente complacido por el trato, y es que ser un flojo para el era casi algo innato.

Lo atendían como un rey, las niñas de los alrededores no dejaban de verlo como si fuese el hombre más interesante que hubiesen visto alguna vez y el resto de la familia lo elogiaba por distintas razones cada pocos minutos.

El bebé también parecía feliz de estar allí, sentado sobre muchas mantas suaves y una pequeña colcha rellena de plumas las cuales sacaba sin detenerse por las costuras.

Jungkook no sólo había tenido la oportunidad de conocer a la familia de Taehyung sino también a la de Yoongi, su madre parecía una mujer amable y extremadamente sensible.

El cirujano no estaba seguro de cuanto tiempo llevaba el grosero amigo de su esposo fuera de casa, pero le partió el corazón ver a la mujer llorar al verlo después de algún tiempo.

Jungkook no había querido parecer grosero y mencionar algo inapropiado al conocer a Nayeon, la madre de Yi-seo pero sólo bastó con que su mirada se moviera desde Jimin hasta ella y de regreso para que su expresión lo dijera todo.

Yoongi tenía un tipo.

El tipo de tener un alto fetiche con las sonrisas hermosas, ojos amables y cuerpo menudos.

La mujer parecía ser alguien agradable y entusiasta, justo como Jimin.

Ella básicamente era Jimin en versión femenina.

O Jimin era una versión masculina de ella.

En cualquiera de los casos, parecían hermanos nacidos de una misma madre.

Peaches and Cream // Libro N#2 KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora