Capítulo 1

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Era algo interesante ver que tan diferente era la nieve en Goldenleonard a como era en el Norte. Había estado nevando por lo que se sentía eran días en el reino y Wolfgang se sentía como si se fuera a volver loco al no ser capaz de dejar el palacio, ni siquiera por un momento.

"¿Majestad? ¿Está todo bien?" preguntó Soohyuk mientras revisaba un documento.

"¿Hm? Sí, supongo". Wolfgang suspiró, mirando fuera de la ventana a nada más que un amargo, blanco frío.

Estaban atrapados en la librería, como usualmente lo estaban. Cuando estaban así—Soohyuk trabajando incansablemente y Wolfgang viéndolo—no hablaban mucho. Eso no molestaba a Wolfgang demasiado, pues sabía que en algún punto tendría la atención de Soohyuk. Aunque, justo ahora, él solo quería salir.

"Disculpe mi insistencia, Su Majestad, pero parece que algo está en su mente." Soohyuk bajó su pluma.

"Solo estoy aburrido, eso es todo. En la tradición de invierno, supongo."

Wolfgang descansó su cabeza en sus brazos. Mirando todavía por la ventana con nostalgia. Parecía que las ráfagas y el aguacero de nieve nueva comenzaba a descansar un poco. El tono dorado de la biblioteca se sintió lavado por la blancura que se filtraba a través de las ventanas.

"¿Le gustaría ir a dar un paseo, Majestad?"

Wolfgang levantó la cabeza. El Ministro de Finanzas se atrevió a preguntarle si le gustaría ir a, "¿dar un paseo?" ¿Qué clase de blasfemia era esta? No hay pausas en los ojos de Soohyuk.

"¿Me estás preguntando porque me veo miserable?" Wolfgang entrecerró los ojos.

"Para decirlo honestamente, sí."

"Si digo que sí, ¿irías conmigo?"

"Si eso es lo que quiere, Majestad."

Wolfgang arrugó la nariz. Incluso si se veía miserable y aburrido, en el gran esquema de las cosas, disfrutaba pasar tiempo con Soohyuk, no importaba si tenía que estar sentado en silencio mientras el otro trabajaba, o si era acurrucado en la cama después de un largo día de trabajo. Aun así, parecía molestar a Wolfgang cuando la plática de "¿eso es lo que quieres?" surgió.

"Honestamente." Comenzó Wolfgang. "Me gustaría si lo decidieras por ti mismo." Se recargó en el respaldo de la silla y miro al techo. Elevado. Florido. "Me encanta pasar tiempo contigo donde sea. Ya sea adentro o afuera."

Cuando Wolfgang regresó su mirada a la mesa, Soohyuk tenía un ligero sonrojo. Bastante gracioso, Wolfgang se encontró así mismo sonrojándose también. 

"Ah, ya veo." Soohyuk se acomodó sus lentes y se aclaró la garganta. "¿Que sea breve, entonces?"

Wolfgang sonrió y se paró de su silla.

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Raramente. Muy raramente, Wolfgang conseguía que Soohyuk saliera del palacio para hacer algo con él. Aunque sabía que no era porque él no quisiera. Wolfgang sabía que Soohyuk se preocupaba innecesariamente por su seguridad, sabía que Soohyuk prefería trabajar que jugar, sabía (en esta ocasión) que Soohyuk odiaba el frío.

Pero era agradable. El crujido de la nieve fresca y sin tocar debajo de sus pies. El olor de los árboles de hoja perenne en la distancia. Wolfgang respiró hondo mientras caminaba hacia adelante, alejándose un poco más de Soohyuk en el proceso.

"Tenga cuidado, Su Majestad." protestó Soohyuk.

Wolfgang se rió. "¿Cuidado con qué, Shin? Solo es nieve."

Y él era hermosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora