BBRae Week 2021

Día 7: Campanas de boda

Habrá un día 6 cuando logre darle un digno final al día 3.
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Rachel no puede creer que ha llegado esa época de su vida en la que debe asistir a las bodas de sus amigos. No es que los envidie o algo parecido, de verdad se alegra por ellos. Es solo que la fiebre de bodas parece ser contagiosa, y teme por lo que a su novio le esté pasando por la cabeza al asistir a cada fiesta.

No es que ella no ame a Garfield, en verdad lo hace, y mucho. Tan solo es el hecho de que ella nunca ha sido una fiel creyente del matrimonio como garantía de una vida plena. Ella no necesita un papel ni una ceremonia costosa para que quede claro cuánto quiere a su pareja. De hecho, nadie lo duda de tan solo verlos. Sobre todo si se es conocedor de esas manías suyas y lo poco cooperativa que es ella a unirse a la euforia del rebaño si no es en compañía de cierto rubio hiperactivo.

Hay muchas locuras en las que está dispuesta a seguir al idiota de Logan, pero no está muy segura de sí casarse pueda entrar en esa categoría.

Ellos llevan viviendo juntos alrededor de seis años, se conocen desde que ambos asistían a la preparatoria, y Rachel puede decir que su relación ha sido de lo más sana que se puede ser si la compara con las que han tenido sus amigos más cercanos.

Quizás ellos aún no han comprado ropas caras que usarán tal vez solo una vez en su vida, pero si que han comprado un departamento juntos, y esperan poder usarlo por muchos años más.

Tampoco han planeado una gran fiesta que les cueste varios sueldos juntos, pero si que han abierto una cuenta de ahorro para cuando Rachel consiga una úlcera por sus enojos constantes, o para cuando Garfield por fin se rompa la pierna luego de las idioteces que hace.

Rachel está segura de que, si hay un beneficio en todo ese asunto, ese es el de compartir un seguro médico y un préstamo del banco. Y tan solo por eso, aún no ha descartado la idea.

Una vez más aplaude a la pareja en turno. En esta ocasión son Kory y Richard, que lo suyo les ha costado llegar a una estable relación.

La pelirroja, más sonriente que nunca, arroja su ramo hacia sus amigas, y para sorpresa de todos, estas caen directo a las manos de la chica teñida en violeta.

Rachel observa el ramo con recelo, eso debe ser una broma. Al girar su vista, se topa con el coqueto rostro de Garfield, que le ha guiñado un ojo para insinuar sus planes. Eso solo le consigue un tic en el ojo, y opta por arrojar el ramo a otra victima.

—Borra esa sonrisa, Logan.

Garfield no parece decepcionarse por esa respuesta, pues él mejor que nadie conoce a su pareja, y solo atina a pasar el brazo por la cintura de la chica y así abrazarla. Para él no es nada desconocida la postura de su chica por ese tema, y nunca lo ha visto como un problema. Ambos han presenciado en sus vidas lo frágil que puede ser un matrimonio, y sobre todo, las consecuencias que eso puede llevar.

Garfield no necesita un papel para saber cuánto lo quiere Rachel. Le basta con el apoyo incondicional que ella siempre le ha brindado.

Quizás algún día, cuando ambos dejen de temer por desepcionar al otro, logren dar el gran paso final. Quizás pronto, quizás no. Lo único seguro es que, ninguno querrá darlo, si no es de la mano del otro.