Deberíamos

CAPÍTULO 4

Valeria

El trayecto había acabado y nos bajamos del autobús.

Primero dimos una vuelta y entramos en la tienda en la que había visto las zapatillas. Costaban 80 euros y solo quedaba un par. Como no llevaba tanto dinero encima no me las pude comprar.

Entramos entonces en H&M  y nos probamos varios vestidos. Carla se decidió por uno de un tono azul eléctrico que era por encima de las rodillas y de sisas muy favorecedor. Y yo por uno en un tono azul claro también de sisas que llevaba rosas pequeñas que lo cubrían y por la parte de adelante me cubría hasta las rodillas y por la de atrás se dejaba caer casi hasta un poco más encima de mis tobillos.

-¡Mírate, estás espectacular!-le dije

-Tu también lo estás-dijo dedicándome una sonrisa

Después de pasar por la caja de la tienda nos dirigimos a Maripaz para probarnos algunos zapatos para ésa misma noche. Yo escogí unas alpargatas negras altas muy bonitas que se ataban a la pierna con un hilo negro, al principio Carla no quería llevar tacones porque no le gustan esos rollos pero acabé convenciéndola para que se comprara unos negros que estaban abiertos por la parte de alante.

Después de comprar nuestros modelitos para arrasar en la fiesta recordamos la invitación de Rubén para ir a la piscina y entramos en Calcedonia decididas a comprarnos dos bañadores que hicieran que cualquier chico cayera rendido a nuestros pies. Carla se compró un bañador de tipo marinero con unas rayas azules y blancas y un ancla, y yo otro en un tono rosa fosforito que en la parte de arriba dejaba caer unos hilitos de este mismo color.

Mientras paseábamos cargadas con nuestras bolsas decidimos entrar a Burger King y merendar algo. Carla pidió una hamburguesa y una CocaCola y yo otra hamburguesa y un Nestea.

Después de servirnos las bebidas en los vasos nos sentamos en una mesa lo más alejada posible del mostrador para poder hablar de nuestras cosas…

-Bueno, entonces eso que dices de Rubén… ¿Crees que se arriesgará por mi teniendo a todo ese montón de chicas que tiene detrás suya?

-Vamos, no digas tonterías, claro que si...

-Tampoco me quiero hacer ilusiones…

-Mira yo lo conozco y se como es. Creo que está enamorado, y no te diría esto si no estuviera al 99,9% segura de lo que digo-y bebió un poco-Tal vez tarde en darse cuenta de lo que le pasa contigo, pero en algún momento lo hará

-Ya pero puede cambiar su forma de pensar…-dije soltando un suspiro y mordiendo un cacho de mi hamburguesa

-No lo creo… Te voy a contar una cosa-hizo una pausa-Él hoy no tenía pensado venir a Orense pero en cuánto se enteró de que íbamos a bajar en autobús se buscó una excusa para bajar y encontrarse contigo. Así que si eso no significa nada…

-No sabía eso-dije con una sonrisa en la cara

-Pues claro que no lo sabías tonta, por eso te lo cuento y para eso estoy, para ayudarte en todo lo que pueda nena, y no dejaré que el idiota de mi hermano te haga daño-a continuación me guiño un ojo y ambas nos empezamos a reír.

-¿Y con quién quedó?

-Creo que no quedó con nadie. Supongo que estará en la pista para skaters practicando.

-Podíamos haberle dicho que viniera…

-No sé… Aunque me llevo muy bien con él tampoco me hace mucha gracia tenerlo por aquí. Porque si estuviera él no podríamos hablar tranquilas…