Parte 1: Y nunca dije nada

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YO

Me quedé callada y guardé mis sentimientos.

No debí hacerlo. Pero ¿acaso eso habría hecho alguna diferencia?

Las palabras esa noche no podían salir de mi boca, porque estaban atoradas en mi garganta o dándole color a mis mejillas. Quise preguntarte la razón, cada uno estaba en su lugar y ninguno se movió durante toda la película. ¿Qué debía hacer? Solo era una chica enamorada e inexperta en el amor y tú, eras perfecto y tenías las palabras adecuadas en cada ocasión.

El frío fue horrible a la salida, pero mi mundo se calentó en el instante que me cubriste con tu chamarra. Caminamos juntos hasta mi casa, platicamos del buceo y lo mucho que te fascinaba (debo confesar que, en ese momento, me enamoré un poquito más de ti), me encantaba escucharte hablar de tus aficiones y ver lo mucho que te emocionaba perseguir tus sueños.

Todo cambió en ese momento porque antes de entrar y cruzar la puerta, dijiste las palabras que menos deseaba escuchar y desafortunadamente, alcancé a ver el brillo en tus ojos cuando preguntaste por ella. Salí del cuadro, de nuestro cuadro y no tienes idea de lo mucho que dolió.

Esa noche fue envenenada por un aroma que jamás podré olvidar, estaba demasiado concentrada en el crujir de mi corazón que nunca la escuché bajar las escaleras y solamente la vi correr hacia ti... El mundo se desmoronó y pedazo a pedazo se fue al infierno para comenzar a arder.

Si te soy sincera, jamás me imaginé deseando no escuchar tu voz, pero hiciste todo mal, debiste quedarte callado y dejarme entrar tranquila a mi hogar. ¿Acaso eso era tan difícil? Supongo que cuando alguien se cuela en tu sistema es como un virus, se vuelve inevitable querer estar cerca, verle feliz y con la esperanza de ser correspondido.

Los vi abrazarse y le dijiste las palabras que durante mucho tiempo anhelé que me susurraras al oído, supongo que me embriagué de sueños y olvidé la realidad...

En ocasiones, cuando los pensamientos perdidos rondan sin rumbo por mi mente, me pregunto si hay algo que hubiera podido hacer distinto.

Nunca dije nada (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora