Mis últimas nubes

No puedo, quiero y quisiera

James
No saber cuándo poder decirle la verdad es uno de mis mayores temores. Siempre he sido aquel niño enamoradizo y, eso, al paso de los años, desgraciadamente, no cambió.
No puedo evitar encariñarme con ella cuando es tan dulce conmigo, cuando su mirada relaja todos mis sentidos haciéndome perder la noción del tiempo. No puedo evitar mirarla a los ojos sin imaginar un futuro con ella. No puedo estar a su lado sin que mi corazón se acelere, sin esas ganas locas de besarla, pero su prestigio se iría al traste y todo por mi culpa. No puedo  parar de pensar en ella en todos los sentidos, en como esa manera de amarla intensamente hace que me odie a mi mismo por ser alguien que se ilusiona tan rápido. No puedo esperar a tener un gran futuro con ella. No puedo ser yo quien le rompa el corazón ni quien le libre de sus libertades.
No quiero perderla y eso es un hecho bastante cruel, pues cuando se entere de todo lo que soy huirá y no solo por mi estatus social, si no por mi gran enfermedad.
Temo a que mi estima hacia ella se convierta en obsesión, pues no me gustaría nada que eso pasara ya que sería el fin de nuestra relación, la cual lógicamente solo existe en mi cabeza.
Quiero ser esa persona que la empuje a superarse a si misma, ver como consigue sus metas y sonríe ampliamente. Quiero ser el hombre al que mire y sepa con certeza que es una gran elección. Quiero ser aquel a quien acude cuando sus demonios no la dejan dormir. Quiero ser yo quien la estremezca con tan solo esta presente. Quiero ser a quien mire en un salón repleto de gente adinerada. Quiero ser su marido, al cual le tenga tal confianza como para contarle todo con total naturalidad y confianza. Quiero ser la persona con la que comparta momentos, risas y recuerdos preciosos. Quiero ser su memoria, la persona a la cual no olvidara jamas, aquella que marcara un antes y un después y, aunque suene egoísta, la que nunca olvidará.
Quisiera ser bueno para ti Lisa, poder redactar ese cuento de hadas que claramente te mereces. Quisiera estar junto a ti en cada momento. Quisiera poder escuchar tu risa sonora cada minuto del día. Quisiera prepararte un picnic a la fresca para que pudieras visualizar la naturaleza que tanto te gusta. Quisiera tener un telescopio para que así ambos pudiéramos mirar las estrellas. Quisiera cumplir todas tus fantasías sexuales, ser el hombre que no te juzgue por tus gustos a la hora de hablar de sexo y ser aquel que te ayude a cumplir esas fantasías. Quisiera ayudarte con tus sueños, los cuales actualmente desconozco pero me encantaría conocer.
Quisiera saber tantas cosas y hacer tantas cosas, pero me disculpo, soy tan solo un cobarde al que le da miedo el rechazo en un una sociedad tan oscura como la nuestra.
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Hola gente nocturna. ¿Qué tal se encuentran? Espero que bien. Aquí les dejo otro capítulo narrado por James.
Sinceramente el objetivo de que vean su perspectiva es que le vayan conociendo, no solo como un personaje secundario, si no que lo conozcan en profundidad.
Espero que les haya gustado y sobretodo gracias por seguir leyendo.
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