Mudanza odiosa

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Y aqui estoy, dirigiendome a mi nuevo hogar con mis padres. Al principio no me gustaba la idea de trasladarme a Londres en el ultimo año de instituto, pero a mis padres, como abogados que son, les habian ascendido a se tenian que trabajar alli, y como todos los adolescentes, mi opimión no cuenta en absoluto.

Todavia quedan dos horas para llegar a Londres, y ya he escuchado todas las canciones de mi telefono, ahora estoy por Love me like you do de Ellie Goulding.

- Papa, ¿queda mucho?- le pregunto a mi madre quitándome el casco.

- Cristal, hija, ya me lo has preguntado como unas siete veces desde que salimos del aeropuerto.

- Lo sé, pero ninguna de las siete veces me has dicho lo mismo: "Ya queda menos"- Dije la frase que mi padre habia repetido desde que nos hemos metido en el coche entre comillas- Siempre me respondes lo mismo.

- Ya queda menos...- Dice mi padre con una sonrisa en la cara.

Me vuelvo a poner el casco para no escuchar a mi madre reir.

Mis padres siempre han estado a mi lado cuando mas lo he necesitado. Aunque su trabajo les quita bastantes horas conmigo, no me quejo porque sé lo importante que es su trabajo. Mi madre quiere que estudie derecho, pero cuando la dije que me queria dedicar a actuar se volvio loca. Al fianl mi padre la calmó y dijo que estaba bien que yo actuase pero deberia de sacar mis estudios con buena nota. Y lo estoy haciendo. Basicamente me considero una chica adolescente sencilla, normal y empollona.

- Cariño, ya hemos llegado- Dice mi madre despertándome de mi pequeña siesta.

- Por fin, ya no aguantaba mas. Mi culo ya no aguantaba mas.- Dije abriendo la puerta del coche y salido a toda prisa.

Nuestra nuva casa era grande- no más grande que la que teniamos antes- pero daba igual. La fachada era de ladrillo rojizo, la puerta principal era grande y blanca. Me encanta el jardin que rodeaba la casa, Tomé aire, aire fresco en pleno otoño, me encantaba.

Vi a mi padre sacando las maletas para meterlas dentro de casa, supuse que mi madre ya estaria dentro porque no la vi por nigún lado,

- Cristal, ven, ayudame- Dijo mi padre sosteniendo como dos maletas en cada mano. Era gracioso contemplarlo asi, de esa forma. - No te me quedes mirando, ayudame.

- Ya voooy- Alargé la última palabra por lo cansada que estaba del viaje y por la cara que se puso a mi padre de enfado.

*Nota mental: No volver a hacer eso si no quiero que me regañe*

*Nota mental: No hacer caso a la primera nota mental. *

*Nota mental: Dejar de esto, luego no me voy acordar y parezco estúpida.*

Cuando entre en el hall de la casa me quedé pensando. "Nueva casa, nuevos amigos..."-pensé dejando las maletas en el suelo.

- Hija, no te quedes en medio y lleva tus cosas a tu habitación- djjo mi madre ordenado y poniendose de los nervios por la mudanza.

- Ya voy mama.- Dije cogiendo mis cosas y dirigiendome a mi habitación. Con mi madre no me atrevia a poner la cara que le a habia puesto antes a mi padre, a veces me daba miedo mi madre... pero, ¿ a que adolescentes no le daba miedo su madre?

Me dirigí a la que seria mi nueva habitacion, abri la puerta y me quedé boca abierta, esas cosas no eran mias, habia cajas con un logotipo que yo sabia a la perfeccion que no era el logotipo de la empresa que mis padres habian contratado para que nos ayudase a la mudanza. Deje mis cosas en el suelo y busqué a mi madre.

Cuando la vi estaba colocando los utensilios de cocina en sus respectivos cajones.

- Mama. creo que se han equivocado- Mi madre soltó lo que tenia en las manos para dejarlo en la encimera y mirarme mal- Me refiero a que hay unas cajas en mi habitación que no son las mias.

- Oh- Dijo mi madre recuperando la sensatez- Creo que se habrán confundido de casa. Tambien los vecinos de al lado se estan mudando. Dile a tu padre que baje esas cajas y acompañale a devolver sus cosas.

- Vale.

Mi madre llamó a mi padre para que me ayudara a bajar las cajas por las escaleras. Éste habia obedecido sin rechistar "Creo que tambien le tiene miedo como para no desobedecerla"- pensé.

Llamé al timbre y de inmediato nos abrio una chica que parecia ser de mi edad. Era mas alta que yo- eso no es muy dificil de superar- tenia unos bonitos ojos cafés oscuros y su cabello era castaño, tambien oscuro.

- Hola- dijo con una voz dulce.- ¿ Os puedo ayudar en algo?

- Hola- Ahora me toca a mi ser dulce- Si, verás, creo que vosotros tambien os habeis mudado y por un error y vuestra empresa de mudanza han llevado estas cajas a nuestra casa- le dije mostrándole las cajas que sostenia mi padre detas de mi.

- Oh, claro- dijo con una sonrisa- por eso me he vuelto loca por donde habia puesto yo mis libros- dijo riendose y haciendo que yo tambien riese- al final mi madre tenia razón...

Le di las cajas y nos despidiendo con una sonrisa. Al parecer he hecho una amiga.

Mi padre se dirigia hacia el jefe de la empresa de mudanza para acabar con todo ya. Yo iba caminado feliz cuando me encontraba en suelo y algo encima de mi, impiendo que respirar. Queria saber que habia chocado contra mi. No era "algo" sino "alguien". Me quedé con los ojos y la boca abiertos. Nunca antes habia visto unos ojos tan bonitos como los de el chico que estaba encima mio... un momento ¡el estaba encima mio y me quedé quieta sin hacer nada! Reaccioné al instante.

- Perdona, pero, ¿te podrias quitar de encima mio de una vez?- le dije llevando mi mano a su abdomen.

- No, estoy muy bien donde estoy- me dijo el desconocido con una amplia sonrisa

- Lo estarás tu, yo no- Dije intentado levantarme. Me costó despegarme al idiota este, cuando ya estabamos de pie los dos me fui sin decir nada.

- ¡Espera!- Me dijo el idiota que habia chocado contra mi- No me has dicho como te llamas.

Arrogante y directo. Ya me cae mal.

- No te lo he dicho ni te lo voy a decir- dije soltandome de su mano- adios.

- Bueno, no pasa nada ya me aprenderé tu nombre cuando no pare de repetirlo en mi cama.-Dijo giñandome un ojo- Tu tambien sabrás mi nombre cuando no pararás de repetir una y otra vez.

Y se fue corriendo asi de tranquilo. No me puedo de creer que no haya popido contestar a esa idotez, pero no he podido, porque no dejaba de mirar sus preciosos ojos que..¡NO! No son precioso ni el tampoco.

Espero no volver a encontrarme con ese estúpido mas en mi vida.

Holaaaa!!!!!!! Espero que os haya gustado.

Creo que para ser mi primer capitulo de No soy tuya, es bastante largo pero os aseguro que a sido un placer escribirlo.

Otra cosa subiré capitulos los fines de semana ;)

Voatd y comentad!! ;) ;) ;) un beso LECTOR@S

En portada Cristal Jones
 

No soy tuyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora