GUERRA

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ORIGEN DEL GUARDIAN DEL SEPTIMO NIVEL INFERNAL "VIOLENCIA"

Otro día transcurría en esta terrible monotonía. Había perdido cualquier esperanza en lo que respecta a mi ¿Quién podría salir de este agujero? Jamás lo hubo y nunca los habrá. Todo era una mierda por donde quisieras voltear. Vivir en este basurero dimensional ni siquiera sé, si puede ser llamado hogar. Pero al menos, quiero suponer y encontrar el lado positivo de las cosas teníamos un techo en el cual resguardar nuestros cuerpos de las cambiantes estaciones y de los cambia formas. Vivir en la dimensión "Insidious" forja tu carácter de una forma particular.

Hombres con la habilidad de cambiar sus pieles y romper sus huesos transformándose en alguna clase de bestia. La cadena alimenticia y la ley del más débil eran las leyes que regían esta porquería de lugar.

Veintitrés años condenado a esta miseria. ¿Qué podría esperar? El bastardo de nadie, pero a la vez de todos. Mi madre, Seugi. La prostituta más conocida del siglo dieciocho. La mujer que no podía ocultarse por ser realmente hermosa y que a pesar de sus numerosos amoríos seguía condenada a ser tirada como la peor de las ratas. Exiliada como si tuviese alguna clase de enfermedad durante el día, pero cada puesta de sol, los animales salían y la buscaban.

No puedo culparla y aunque algunas veces mi estima hacia ella fuera reemplazada, era la vida que nos tocó vivir. Y el sello que estábamos condenados a cargar. – ¡Vamos Molly!, tienes que comer algo. – trataba de animar a mi hermana menor a probar aquel "pure" con migajas de lo que supuse eran huesos de pollo.

– No todos los días podemos comer carne. – pensaba que haciendo esa clase de comentarios trataría de aligerar un poco la carga que los dos teníamos sobre nuestros hombros.

– Entonces hermano, por favor come tú. – sus delgados brazos arrimaron aquella vajilla rota a mi dirección.

– No Min, no tengo hambre. – aunque la afirmación me convirtiera en un mentiroso era esa clase de mentira blanca que no me molestaban en decir.

– Sé que tienes hambre, pero siempre dices que no para que yo pueda comerlo. – sus ojos estaban llenos de lágrimas.

Como odiaba verla a punto de romper en llanto. A pesar de que no teníamos nada material en nuestras vidas. Yo, realmente amaba a mi hermana y haría cualquier cosa por ella. Lo único bueno en esta vida era el sentimiento de apoyo y cariño. Así que mi vida giraba en torno a hacerla feliz y llenarla de mundos de fantasías para que no se diera cuenta de nuestra verdadera situación.

– ¡Taehyung!. – giré mi cabeza a la pequeña choza de palos y algunos trapos que llamábamos "casa".

– ¡Maldita sea, te estoy hablando! –Molly me miró con terror, Seugi nunca despertaba hasta no ser mas allá del atardecer. Sonreí confiado para transmitirle a mi hermana que todo estaría bien. – ¡Dios, está despierta! – su cuerpo empezó a temblar el cual rápidamente le hice una seña con el dedo "guarda silencio". Me levanté de lo suponíamos era una mesa con un poco de moho, directo a su llamado.

FALLEN  | LIZKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora